El Gobierno evalúa avanzar en la privatización de la empresa de Agua y Saneamientos Argentinos S.A. (AySA) que en las últimas horas despidió a 200 trabajadores. Así lo confirmó el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien planteó que el recorte forma parte de "una puesta en valor".
En la habitual conferencia de prensa, el funcionario nacional explicó: "Es un poco como cuando vos vendés tu auto, te lo vienen a ver y se lo mostrás lavado, con chapa y pintura".
"Hay empresas a privatizar que hay que ponerlas en valor para hacer que funcionen de manera más eficiente. Esto no es 'que se arregle el que viene' porque lo que va a pasar es que el perjuicio para los argentinos va a ser mayor porque la empresa va a tener menos valor cuando se quiera concretar la venta", agregó.
En la misma línea, aclaró: "Esto lo vas a ver no solo en Aysa, sino en un montón de empresas que, independientemente de que se privaticen o no, todas se van a tratar de sanear y que el contribuyente deje de sostener cosas que no debe sostener".
Hoy la empresa la comanda Marcelo Papandrea, quien asumió con la nueva gestión.
En las últimas horas, desde la firma se emitieron 100 telegramas de despidos y se esperan otros 100. Al respecto, Adorni subrayó: "Lo hicimos sobre Télam, el Inadi y otros organismos del Estado que no solo importa sacarse de encima el gasto total, sino que queremos ir reduciendo el gasto total para que el contribuyente tenga menos carga sobre su espalda".
"No está descartada absolutamente ninguna privatización de las empresas del Estado, lo que no quita que algunas privatizaciones se hagan y otras no", concluyó. Fue el propio Milei el que sostuvo en campaña que "AySA era Aguas Argentinas, era privada y funcionaba muy bien" y retrucó que "todo lo que hace el sector público lo hace mal".
Su idea es hacer cumplir que "todo lo que pueda estar en manos del sector privado, va a estarlo".