El empleo entre las mujeres con discapacidad creció en 2022 seis veces menos que entre los hombres, según se desprende del informe "Radiografía del mercado laboral de las personas con discapacidad". El análisis, elaborado a partir de los últimos datos facilitados por el Imserso y el INE en 2022, refleja que ese año alrededor de 21.000 personas con discapacidad lograron un empleo. Sin embargo, el aumento se dio casi exclusivamente entre los hombres, con una tasa de crecimiento del 6,6% frente al 0,7% entre las mujeres, según señala el documento elaborado por la Fundación Randstad junto a Randstad Research.
En nuestro país hay 1,9 millones de personas con discapacidad en edad laboral (de 16 a 64 años), de las cuales 845.000 son mujeres (43,5%), un 1,5% más que en 2021. De las mismas, 287.100 se encuentran activas para trabajar, lo que se traduce en una tasa de actividad del 34%, ligeramente inferior al año anterior. Desde 2014, las mujeres activas han crecido un 20%.
Por otro lado, el empleo entre las mujeres con discapacidad ha disminuido levemente en 2022, hasta alcanzar las 227.800 personas. Esta cifra sitúa la tasa de empleo del colectivo en el 27%.
En cuanto a su perfil, el 90% son asalariadas y 3 de cada 4 tienen un contrato indefinido a jornada completa. Asimismo, más de la mitad tiene un nivel formativo medio, mientras que el 38% posee estudios universitarios, un peso superior al del conjunto de los ocupados con discapacidad con ese nivel de formación (31%).
Tal y como ha señalado la directora de la Fundación Randstad, María Viver, “el mercado laboral de las personas con discapacidad se comporta de manera dispar entre los hombres y las mujeres, de forma que el crecimiento de la actividad y del empleo están protagonizados por ellos, mientras que la reducción del desempleo es básicamente femenina”. Estos datos son, en su opinión, “muestra de que la presencia de las mujeres en el mercado laboral es más débil”.
Así, en lo que respecta a la situación de paro de estas mujeres, destaca la mejora experimentada en 2022 respecto al año anterior, con 8.500 personas menos, lo que supone una tasa de paro del 20,7%. “No cabe duda de que queda mucho camino por recorrer, pero el hecho de que el paro entre las mujeres sea cada vez menor es un indicativo de que se está trabajando en la dirección correcta”, ha asegurado Viver.
Fundación Randstad, que trabaja por conseguir la igualdad de oportunidades en el empleo para las personas con discapacidad, atendió en 2023 a un total de 5.059 usuarios. De ellos, 2.978 (58,87%) fueron mujeres. Además, el 40,60% de los contratos laborales firmados a través de la entidad fueron para mujeres.
“Como sociedad, tenemos la obligación de garantizar un acceso igualitario al empleo, y en ello trabajamos desde Fundación Randstad, para ayudar a las empresas a incorporar talento diverso, de personas con discapacidad, hombres y mujeres, en igualdad de condiciones”, asegura María Viver.
Tal y como refleja el informe, en términos generales la población con discapacidad se concentra en los rangos de edad más altos. Así, el 40% tiene entre 35 y 64 años, mientras que un 48% son mayores de 65 años y tan solo el 5% son menores de 17 años.
Por tipo de discapacidad, la más representativa es la osteoarticular (29%), seguido de la intelectual (18%) y la crónica (16%). No obstante, el mayor crecimiento se da en el grupo de otras discapacidades (7,3%) y en la discapacidad mixta (4,1%).