La Universitat de Barcelona (UB) ha decidido modificar su código ético y pasará a considerar "mala praxis profesional" las relaciones sexoafectivas entre profesores y alumnos. La intención de la universidad es evitar "situaciones de abuso y/o de conflicto de interés en el proceso de evaluación y supervisión", según afirma la UB en un comunicado.
La decisión llega meses después del revuelo que ocasionó una investigación de elDiario.es, que desveló los mensajes y el presunto acoso sexual por parte de un vicerrector de la universidad, Jordi Matas, a una alumna a la que tenía que dirigir el trabajo de final de grado.
La publicación generó protestas estudiantiles y la condena de un centenar de profesores, que pidieron al Rector de la universidad una investigación independiente del caso, una revisión de los protocolos y que se tomaran medidas cautelares al respecto. Matas dimitió de su cargo 48 horas después de la publicación del artículo, aunque sigue como profesor de la UB sin que este curso se le haya asignado docencia alguna.
La modificación del código ético considera que estas relaciones entre profesores y alumnos son "claramente asimétricas, con un evidente componente de superioridad" en "todos los casos" e incluye también los casos en que no se compartan asignaturas o evaluación de trabajos académicos.
El cambio llega a propuesta de la Unidad de Igualdad de la UB, en línea con el Protocolo contra el acoso en la universidad que diseñó la Generalitat de Catalunya. La vulneración de este código ético, sin embargo, no supondrá la apertura de ningún expediente ni contempla sanción alguna.