Ganar a estos
Miami Heat es una tortura. Incluso
sin Jimmy Butler, haciendo hasta de la falta de su casi todo en ataque alimento para competir y no una excusa, poniéndolo crudo e incluso resistiéndose a morir estando 108-100 abajo a falta de 30 segundos (recortado hasta el 108-105 a falta de 22). Pero, con un
Jalen Brunson tímido al principio pero desencadenado al final -23 de sus 30 puntos en la segunda parte-, se arremangaron unos New York Knicks que empatan la serie (1-1) antes de que viaje a Miami con el trepidante 111-105 testimoniado por la ‘créme de la créme’ de los Knicks y el baloncesto pero también del tenis,
Carmelo Anthony y Roger Federer en el Madison Square Garden.
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