Cuando el pequeño Manuel comenzó con fiebres muy altas, el pasado mes de septiembre, su mamá, la vallisoletana Sara Fernández del Río, y su papá lo achacaron a «los virus típicos del comienzo de la guardería». Sin embargo, los días pasaban y el pequeño, de entonces poco más de un año, no conseguía estabilizarse. «No le bajaba la fiebre de ninguna manera. Le veíamos muy decaído, casi sin fuerza». Entonces le ingresaron y en una primera exploración le detectaron el virus de Epstein Barr, la causa más común de la mononucleosis infecciosa. «Vieron que el hígado estaba inflamado pero lo achacaron a ello», sostiene. Como el bebé iba «cada vez a peor» fue sometido a una ecografía «y fue entonces cuando descubrieron todo». El cáncer había invadido el hígado y tras un TAC los facultativos observaron que tenía metástasis en abdomen y pulmones. Manuel fue diagnosticado entonces de un rabdoide, un cáncer «aún muy desconocido» -se contabiliza un caso entre dos millones- sobre el que hay pocos avances porque al ser altamente agresivo «los niños, por lo general, fallecen y se pierden las pocas muestras que hay» para su estudio. Ahora estos 'padres coraje', animados por el jefe de Oncología Pediátrica del Hospital La Paz de Madrid, Antonio Pérez Martínez , han emprendido a través de la Fundación CRIS contra el Cáncer, con una Unidad de Terapias Avanzadas en el citado hospital, una campaña para impulsar la investigación de este tipo de cánceres, que requiere de 150.000 euros de aquí a tres años para obtener resultados clarividentes. Desde que el pasado jueves se abriese la campaña, la iniciativa ha recaudado más de 43.000 euros , y personajes públicos como la actriz Lara Dibildos, la periodista Susanna Griso o el cantante Pitingo lo han divulgado en las redes sociales para darlo a conocer. «La gente se está volcando con Manuel. Estoy muy agradecida», señala Sara, quien lo que más desea en el mundo ahora mismo es poder decir «dentro de unos años» a todos los amigos y gente que les está apoyando que Manuel se ha curado. Recuerda que la noticia cayó como una losa y que la vida de su familia desde octubre nada tiene que ver con la anterior. Por lo pronto, prácticamente desaparecieron de su casa para 'vivir' en el hospital. «Luis, el hermanito de Manuel de tres años y medio, nos extrañaba mucho». Ahora siempre que pueden intentan llevarle a ver al hospital a ver al pequeño. «No queremos que pierda el contacto con su hermano. Cuando le ve ¡parece otro niño! Se vuelve loco de alegría» . Esta semana Manuel se encuentra en casa, pero no será por mucho tiempo. De momento, el pequeño recibe un ciclo de tres quimios y un segundo de dos, como un Sarcoma de Ewing. De la última sesión hace quince días. Según detalla Sara a este periódico, «la quimioterapia parece estar surtiendo efecto y los pulmones prácticamente se han limpiado« . Era una condición imprescindible para que el bebé pudiera ser intervenido con la idea de quitarle «la parte de metástasis» que le queda. Este martes volverá al hospital. «Le van a operar en breve. No sé si será esta semana o la que viene». El siguiente paso sería un trasplante de hígado. Dos o tres casos En estos meses los papás de Manuel han dedicado tiempo a indagar sobre lo poco que se sabe del tumor que está dañando la salud de su hijo. Conocen que afecta mayoritariamente a los niños y que «al año se dan como dos o tres casos», aunque al final de e ste 2022 coincidieron en La Paz tres niños que lo tenían . Aunque al principio los facultativos les dieron que «eran prácticamente nulas las posibilidades de que se salvase», ahora mismo «no sé lo que va a pasar», sostiene Sara, quien explica que por el de momento «está yendo bien y es operable. Podría llegar un momento en el que no tenga nada, aunque tienen miedo a las recaídas porque es un cáncer muy agresivo. Hay niños que no caen, pero la inmensa mayoría sí». Aún así, esta mamá vallisoletana no pierde la esperanza y su empeño, además de la curación de su pequeño, es dar a conocer esta campaña. «Ha sido un boom tremendo y estamos muy agradecidos» , sostiene, a la vez que dice anhelar una mayor implicación de las administraciones a la hora de invertir en investigación.
