Así lo reveló una investigación de la revista Newsweek, en la cual explica que ese metal liviano pero resistente funciona ampliamente para aplicaciones avanzadas como aviones de combate, helicópteros, barcos de guerra, tanques y misiles de largo alcance.
Si Ucrania gana, Washington y sus socios de la Organización del Tratado del Atlántico Norte estarán en la primera posición para explotar un nuevo conducto de ese recurso.
De acuerdo con el sitio web, el Departamento del Interior clasificó al titanio como uno de los 35 productos minerales vitales para la seguridad económica y nacional de los Estados Unidos.
Sin embargo, esta nación importa más del 90 por ciento de dicho metal.
El país norteamericano ya no tiene esponja de titanio en su reserva de defensa nacional, y el último productor local cerró en 2020, acota la fuente.
Por el contrario, Ucrania aparece entre las siete naciones que producen la base de ese metal, grupo en el cual también están China y Rusia.
Una fuente con conocimiento sobre la industria de defensa aquí dijo a Newsweek que el titanio “es una vulnerabilidad clave”.
“Estamos hablando de nuestra capacidad para producir más aviones, municiones. Todos dependen del titanio, y nos hemos permitido depender cada vez más de los proveedores extranjeros para estas cosas”, afirmó el entrevistado que prefirió mantener el anonimato.
A su vez, un miembro del Congreso señaló que la nación de Europa del Este “tiene depósitos realmente importantes de minerales de tierras raras, y si jugamos bien nuestras cartas, podría ser una alternativa realmente atractiva a las fuentes rusas y chinas, que es de donde hay mucha dependencia actualmente”.
La pasada semana, el presidente estadounidense, Joe Biden, anunció que enviará 31 tanques de combate M1 Abrams a Ucrania, luego de solicitudes de armamento por parte de Kiev y denuncias de Rusia sobre cómo esa postura alienta el conflicto.
La notificación ocurrió luego de que Alemania confirmara que haría llegar a suelo ucraniano tanques Leopard 2, si Estados Unidos ofrecía sus Abrams.
El 24 de febrero de 2022, el mandatario ruso, Vladimir Putin, anunció la operación militar especial con el objetivo de desmilitarizar y desnazificar Ucrania y terminar con el genocidio contra los habitantes de la región del Donbass, que comenzó ocho años atrás.
Desde entonces, Washington comprometió más de 27 mil millones de dólares en la supuesta ayuda militar a Kiev y entregó armamentos, a pesar de las alertas de medios de que menos del 30 por ciento de esos envíos llegan a su destino.
Estados Unidos presta asistencia a Ucrania mientras busca acceder a su titanio
