'Génova' pregunta si el jefe del Ejecutivo necesita "150 minutos y un contexto de superioridad" para medirse con el líder de la oposición
MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
El Partido Popular quiere que el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, acepte debatir con el jefe de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, en las sesiones de control al Gobierno del Senado, donde ambos dispondrían de un tiempo similar y tasado de siete minutos.
En 'Génova' recuerdan que Feijóo, que ocupa un escaño en el Senado desde el 25 de mayo, solo ha tenido oportunidad de formular una pregunta de control a Sánchez en la Cámara Alta. Ese primer 'cara a cara' tuvo lugar el pasado 7 de junio, dos meses después del Congreso extraordinario de Sevilla que lo eligió presidente en sustitución de Pablo Casado.
Entonces Feijóo registró la siguiente pregunta: "¿Considera el presidente del Gobierno que su Ejecutivo está a la altura de las necesidades de las familias españolas?". La respuesta de Pedro Sánchez fue que el Gobierno "trabaja sin descanso para proteger a familias y empresas" y el PP "lo único que ha hecho sido estorbar, estorbar y estorbar", unas palabras que disgustaron a la cúpula del PP.
DEBATE EN SEPTIEMBRE Y OCTUBRE PERO CON DIFERENCIA DE TIEMPO
En el equipo de Feijóo reconocen que Sánchez ha acudido en dos ocasiones más en el Senado, el 6 de septiembre y el 18 de octubre, pero destacan que en ambos casos ha sido el jefe del Ejecutivo el que ha elegido "el tema y los tiempos", el primero para hablar de la política energética y el segundo centrado en la fiscalidad.
En 'Génova' ha causado malestar la negativa de Sánchez a debatir de "igual a igual" en esos dos últimos duelos parlamentarios y le afean de haber jugado con ventaja, después que en la comparecencia de septiembre utilizara 132 minutos frente a los 27 de Feijóo, y esta semana empleara un total de 108 minutos frente a los 32 del líder 'popular'.
"Sánchez busca un contexto de superioridad y necesita 150 minutos para explicar sus medidas", recalcan a Europa Press fuentes de la cúpula del PP, que se quejan además de que la presencia de Sánchez en el Senado siempre tenga lugar los martes, día que ya cuenta con el foco mediático por la reunión del Consejo de Ministros y posterior rueda de prensa en Moncloa.
MAROTO LO LLEVARÁ A LA JUNTA DE PORTAVOCES
En la dirección del PP contraponen además el tono y las formas con las que se ha conducido Feijóo en sus intervenciones con la "descalificación" y el "insulto" que, según los 'populares', ha sido la tónica general de los discursos de Sánchez, que llegó a acusar al presidente del PP de "insolvencia y mala fe" el pasado mes de septiembre.
En el PP recuerdan que, con el aterrizaje de Feijóo en el Senado, el Gobierno se comprometió públicamente a mantener con normalidad la frecuencia con la que Sánchez visita el Senado, siguiendo los "usos y costumbres" de la Cámara. Sin embargo, fuentes del PP subrayan que desde junio (pese al obligado parón estival), el jefe del Ejecutivo no ha vuelto a someterse al control.
Por eso, el portavoz del grupo popular en el Senado, Javier Maroto, planteará este asunto al secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Rafael Simancas, en una próxima reunión de la Junta de Portavoces, según han avanzado fuentes 'populares'.
MAROTO PREGUNTÓ A SÁNCHEZ DOCE VECES EN DOS AÑOS Y MEDIO
Desde que es portavoz 'popular', Maroto ha preguntado a Sánchez en sesiones de control en el Senado hasta en doce ocasiones durante dos años y medio. La primera cuestión que le realizó fue en el Pleno del 25 de febrero del año de 2020, sobre la polémica ocasionada por el viaje de la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez a España.
Tras esta primera pregunta llegó la pandemia del Covid y ya Sánchez no volvió a las sesiones de control del Senado hasta principios de mayo de 2020, cuando Maroto le pidió explicaciones de por qué no había acudido a un foro con los presidentes autonómicos en la Cámara Alta para abordar la situación epidemiológica.
Después, Sánchez fue acudiendo al Senado a responder a Maroto y otras dos preguntas más en la sesión de control con una frecuencia media de un mes aproximadamente, salvando los meses de verano en el que no hay actividad en la Cámara Alta.
