En la madrugada del lunes, tras una discusión entre dos personas en el exterior del antiguo mesón La Tía Pepa, en La Cistérniga (Valladolid), un joven recibió un disparó en el tórax que acabó con su vida horas después. Según los primeros testimonios e informaciones, se sospechaba que el fallecido tenía 25 años, residía en la provincia y era de origen portugués. Sin embargo, este miércoles, la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones ha hecho público en declaraciones a la prensa que el finado llevaba documentación falsa y estaba en busca y captura por la Policía. «Podemos confirmar que el hombre llevaba documentación falsa y que era de origen vallisoletano, pero residía en Aranda de Duero (Burgos)», ha explicado Barcones en declaraciones recogidas por ABC para añadir que el desaparecido estaba siendo buscado por la Policía después de que ésta descubriera que, en su piso de la capital ribereña, tenía retenida a una mujer joven en contra de su voluntad a la que, presuntamente, obligaba a ejercer la prostitución . La mujer había sido rescatada el pasado 17 de julio, una semana antes de que se produjera el suceso. «A pesar de los desgraciados sucesos de los últimos tiempos , quiero recordar que seguimos viviendo en una de las provincias más seguras de España », ha subrayado Barcones sobre los luctuosos casos que lleva sufriendo Castilla y León y, en concreto, Valladolid tras los homicidios de este verano.
