En la que fue su mejor campaña con SC Freiburg, Christian Streich consiguió hacerse con el premio al Entrenador del Año de la revista Kicker.
706 miembros de la Asociación de Periodistas Deportivos Alemanes (VDS) participaron en la elección organizada por el medio. También se eligieron al Futbolista del Año masculino y femenino que, al igual que las elecciones de la DFL, terminaron para Christopher Nkunku del RB Leipzig y Lea Schüller del FC Bayern München.
Desde su nombramiento como entrenador en Freiburg en 2011, Streich había terminado en el segundo lugar en dos oportunidades; batiendo, en uno de ellos, un récord como el DT más votado sin terminar primero. Ahora, consiguió ganar las elecciones por primera vez con 276 votos, por delante de Oliver Glasner del Eintracht Frankfurt, que recibió 133 votos, y Steffen Baumgart de 1. FC Köln con 65 votos.
De entre los 28 técnicos que recibieron votos de todo el ecosistema del fútbol alemán, dos de ellos tuvieron más que palabras de elogio para Streich. El primero de ellos fue Jürgen Klopp que, con otro gran año con el Liverpool FC, le alcanzó para estar quinto. De todas maneras, Kloppo fue contundente en su apreciación:
«Uno tiene que decirlo: Absolutamente merecido. A veces toma un poco más de tiempo para que reconozcan tu calidad real. Estoy feliz por él, y por todos los que votaron por él porque demostraron claramente su experiencia futbolística».
Hansi Flick, entrenador de la Selección Alemana, también se mostró feliz por los logros de un colega al que le tiene mucha estima:
«Christian Streich merece todos los honores. Es un entrenador excepcional que logra grandes cosas en Friburgo y al que aprecio enormemente. También es una persona sobresaliente que no subordina todo al éxito. Sabe que hay más en la vida que el fútbol. Christian Streich es bueno para el fútbol alemán».
Por su lado, Streich agradeció el premio a su manera y reconoció a todos los que trabajan con él en su cuerpo técnico, pidiendo que también sean premiados:
«Mi primer pensamiento: recibiré un premio ahora, y todos los que trabajan conmigo no serán nombrados. Soy consciente de mis muchos déficits, como empleado y colega. Ciertamente, no es justo que solo yo sea nombrado. Así que estoy aceptando el premio en nombre de todos en el club. El hecho de que tengamos un éxito razonable en Freiburg solo es posible gracias a la gran cantidad de personas que me apoyan y me aceptan como soy. Incluso cuando no soy tan bueno».