Un hombre de apellido Chacón Parajeles, sospechoso de asesinar al joven de 23 años, Manfred Barberena Novoa, irá tres años y cuatro meses a prisión por un delito de robo agravado. Adicionalmente, cumplirá una pena de 20 días de prestación de servicios de utilidad pública, por ser responsable de un delito de portación ilícita de arma permitida.
La sentencia se dictó esta semana en el Tribunal de Flagrancia de San José, según confirmó la oficina de prensa del Poder Judicial. Los hechos por los que se le acusa ocurrieron los días 9 y 15 de junio; en la primera fecha se le detuvo por robo agravado, pero por motivos desconocidos fue liberado.
En la segunda ocasión el sujeto estuvo en manos de las autoridades por el delito de portación ilegal de arma permitida. 13 días después, el 28 de junio, Chacón, de 23 años, quedó a las órdenes del Ministerio Público como sospechoso del homicidio de Barberena.
Antes de que se le vinculara con el crimen de Manfred, el acusado ya contaba con amplio expediente policial, según reveló el ministro de Seguridad, Jorge Torres, en una entrevista en Noticias Repretel el pasado 5 de julio, el hombre fue detenido en 92 oportunidades desde el 2017 hasta el 2022, lo que equivale a una aprehensión cada 20 días.
Las autoridades policiales indicaron que esta sentencia no está relacionada con la muerte de Barberena, cuyo crimen continúa en investigación. Por lo tanto, se mantienen los seis meses de prisión preventiva impuestos anteriormente.
Manfred Barberena murió el pasado domingo 26 de junio en el Hospital Calderón Guardia producto de varias puñaladas en la espalda y tórax, luego de que un asaltante lo interceptara en las cercanías de Cuesta de Moras mientras esperaba el bus de regreso a su casa.
El ataque ocurrió el pasado 24 de junio, en apariencia, cuando Barberena salió de su trabajo a las 10:00 p. m. y estaba esperando el bus de regreso a su casa.Fuentes policiales afirman que Barberena pidió auxilio luego del ataque en un local cercano, por lo que lo llevaron al Hospital donde después de dos días internado falleció.
Barberena era vecino de Salitrillos, Montes de Oca, trabajaba en una empresa de mudanzas y le encantaban los idiomas, estaba estudiando inglés y soñaba con convertirse en un profesional en criminología.
Sus familiares y amigos lo recuerdan como una persona humilde, honrada y que siempre mostraba una gran sonrisa y carisma a quienes lo conocían, no le negaba la ayuda a nadie y daba a manos llenas sin esperar nada a cambio.
“Era una persona con sueños como tener su carro propio, darle una casita a su mamá, hablar varios idiomas, sacar una carrera y viajar, de él destacamos su buena disposición, desde que era solo un niño tocaba los corazones de todos los que lo conocían, con decirle que el muchacho que le cortaba el cabello nos decía que él nunca iba con las manos vacías, aunque sea un confite le llevaba”, mencionó una de sus primas quien prefirió mantenerse en identidad protegida.
El pasado 9 de julio, un grupo de jóvenes, familiares y amigos exigieron justicia en una vigiilia frente a los Tribunales de Justicia de San José, por los asesinatos de Marco Calzada y Manfred Barberena, que ocurrieron en las últimas semanas en los alrededores del barrio chino y Cuesta de Moras.
