Llegó a su casa, en el número 15 de la avenida de los Príncipes de España, en la localidad madrileña de Coslada, a las 11.15 horas de este sábado, y desde ese momento comenzaron siete horas de angustia y calvario en el interior del domicilio. Un hombre, de nacionalidad rumana, 43 años y antecedentes por violencia de género, se encerró y atrincheró con sus dos hijas, de 12 y 15 años, a las que amenazaba con matar con un cuchillo porque su mujer lo había denunciado por malos tratos. Afortunadamente, agentes de la Policía Nacional lo detuvieron y consiguieron liberar a la menor en perfecto estado de salud.
La pequeña de las niñas logró escapar saltando una ventana que daba a la terraza de un vecino, pero dentro se quedó durante horas la mayor. Al tiempo, el hombre –que bajó las persianas para que no pudiesen observar qué pasaba dentro– aseguraba que quería explosionar el inmueble con bombonas de butano, motivo por el que las diez plantas del edificio tuvieron que ser desalojadas.
Sacar de la vivienda sana y salva a la menor era el principal objetivo de los agentes de Policía Nacional que se desplazaron hasta el enclave. Había miembros de Seguridad Ciudadana, el Grupo Especial de Operaciones (GEO) y la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), además de varios negociadores que intentaron convencer al varón para que depusiera su actitud y soltase el arma. Lo consiguieron sobre las 18 horas: liberó a la niña y luego se entregó. Ambos se encuentran en perfecto estado de salud, aunque sanitarios de Emergencias tuvieron que atender a la madre de las menores y a la que huyó para proporcionarles acompañamiento psicológico. Lo mismo ocurrió con la de 15 años.
La mujer, por su parte, de 39 años y misma nacionalidad que el agresor, en ningún momento estuvo dentro de la vivienda. A él se le acusa de un presunto delito de malos tratos, secuestro y detención ilegal y amenazas graves hacia sus hijas.
