Ancelotti había entrenado el abrelatas durante semanas, ante los problemas del Real Madrid para romper los cerrojos, y el partido demostró que el entrenamiento específico para superar las murallas no se ha aprendido. Faltó remate, precisión y claridad de ideas.
Benzema se someterá a pruebas médicas el martes. Siente molestias en los isquiotibiales de la pierna izquierda. No sintió pinchazo y pidió «el cambio por precaución», adujo el futbolista a su jefe. El objetivo del delantero y del club es que Karim, clave en el esquema de los blancos, llegue bien a la eliminatoria de Champions en febrero, ante el PSG, en París. «Es un problema en el isquio, no es lo mismo de San Sebastián, ojalá podamos recuperarle pronto», adujo Ancelotti con optimismo prudente.
Los pupilos de Carlo no estuvieron finos. Fallaron pases de gol en el área y se estrellaron ante un rival bien colocado y más fresco mentalmente, que hizo dos grandes goles de contragolpe. El enfado de Ancelotti era monumental en el descanso. «Normalmente estos partidos se pierden y hemos sabido sacar un punto», adujo tras el encuentro.
El líder se dejó dos puntos y Militao rescató uno al estilo Ramos
Tras salvar un punto, el responsable deportivo del líder fue directo al analizar lo sucedido: «No tenemos delanteros que puedan jugar en el área, eso está claro. El equipo ha luchado siempre, hasta el final, y por eso hemos sacado un punto. No ha sido un buen partido, pero que hayamos sacado este punto es una buena señal para la plantilla, aunque hemos recibido dos goles evitables y no es para estar contentos, ha sido un partido torcido desde el principio».
La reconocida carencia de un ariete típico le presentó la cuestión de Militao como sucesor de Ramos en el capítulo ofensivo: «Militao aún tiene que aprender en este aspecto. A Ramos le dije que sería un buen delantero. Marcó muchos goles al final de los partidos y de uno me acuerdo muy bien (Lisboa, minuto 93)». Pensó a largo plazo: «Llegamos bien posicionados al parón, pero ahora se juega todo en los próximos meses».
Lucas Vázquez vio la botella medio llena: «Hay que irse contento porque íbamos 0-2. El equipo demostró mucho coraje y ganas de ganar. Nos faltó un poco de acierto en el tramo final. Nos faltaron ocasiones al final, pero tal y como fue el partido hay que irse contentos con la imagen del equipo».
El coruñés abordó el fallo de Karim Benzema en el penalti y el cariño de los aficionados. «Es algo que hay que hacerlo más. A Karim en ese momento no le sirve para nada un silbido. Lo que le viene bien es un aplauso de la afición y es lo que ha demostrado la afición. Es un gesto espectacular. Seguro que el próximo penalti que tenga lo marcará».
Admitió el lateral que hubo cansancio en su equipo: «Quizás sí acusamos el cansancio. Ellos con el 0-1 jugaron su partido y empezaron con pérdidas de tiempo. Vamos a seguir peleando por la Liga con este empate».
Pere Milla, protagonista en el Elche, fue rotundo: «Me sabe muy mal este resultado porque tuvimos al Madrid contra las cuerdas. No creo que lo desaprovechamos porque son muy muy buenos. Pudimos ganar aquí, pero estoy contento con este equipo porque somos un equipazo. Ánimo a los compañeros que se han quedado en casa porque esto también es de ellos. Me pega en la mano y se ha visto la tele. Se puede pitar penalti, pero en el primer penalti me pega Kross y me lo dice. Estamos contentos porque este punto es importante para nosotros. Pedirle perdón a Edgar Badia porque le han pitado dos penaltis. Nuestros tres porteros están haciendo un temporadón».
