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Dicen que para no trabajar más en tu vida tienes que hacer lo más te gusta, y esta puede ser una buena receta.
Los aficionados al snowboard como yo seguro que en algún momento os habéis planteado dejarlo todo, coger el petate y subir a la montaña. Pues es una buena opción, la verdad. ¡Que os voy a decir yo que llevo 17 temporadas a mi espalda dedicadas a la enseñanza de este bonito deporte que marca mi vida ya desde más de una década.
Cardrona, Nueva Zelanda. 2014.
Si os estáis planteando haceros profesionales, lo primero que me gustaría plantearos es:
¿Has cogido alguna vez una clase de snowboard? No hace falta que me contesteis, la mayoría de las respuestas las conozco, seguramente no.
Esa cultura de aprender de manera autodidacta es uno de nuestros males, ya que es difícil c...'
