No se trata de una historia cualquiera. Se trata de una historia realmente emotiva que tiene como protagonista a un chico de 20 años que está luchando contra un cáncer y que ha sido sometido a duras sesiones de quimioterapia para superar dicha enfermedad. Pero tampoco es un chico cualquiera. Es
Devin Plank, un futbolista del modesto
Excelsior Maassluis de la tercera división de los Países Bajos que tuvo la oportunidad de jugar unos minutos ante el Ajax en el Johan Cruyff Arena en partido de octavos de final de la Copa neerlandesa.
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