Las autoridades sanitarias y políticos consideran que lo más lógico es que se juegue a puerta cerrada o con restricciones. A partir del lunes empezarán a tomarse decisiones.
La afición del Tenerife espera y la afición de la Unión Deportiva desespera. El conjunto blanquiazul sigue vendiendo entradas para el derbi canario mientras que la entidad de Pío XII aún no ha puesto a la venta las 700 entradas que tienen para el partido del domingo 2 de enero en el Heliodoro Rodríguez López.
A partir de este lunes, en la misma semana del derbi con todo lo que eso conlleva de movilizaciones, empezarán a tomarse decisiones. Sanidad, LaLiga y el Consejo Superior de Deportes acordaron pronunciarse sobre la presencia de público en los estadios también a partir del próximo lunes.
La opción de que el estadio esté sin restricciones disminuye según pasan los días. Las versiones más optimistas hablan de un 50% o 75% de aforo mientras que otras abogan porque el derbi se juegue a puerta cerrada, tal y como ocurrió la pasada temporada.
Amós García Rojas, presidente de la Asociación Española de Vacunología, en declaraciones a Cope Tenerife, considera que «honestamente, con la presión que está generando la pandemia, lo razonable es que se juegue a puerta cerrada» a pesar de que «todos queríamos estar en el estadio animando a nuestro equipos, pero tal y como está la situación hay que ser prudente».
Por su parte, Pedro Martín, presidente del Cabildo de Tenerife en Radio Marca Tenerife, explicó que «por el momento no hay nada decidido, pero probablemente la próxima semana se tomen decisiones en relación a los aforos en las instalaciones deportivas». Por lo tanto, habrá que seguir esperando y desesperando.
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