El Gobierno de EE.UU. celebró este jueves la liberación de los doce misioneros norteamericanos que permanecían secuestrados por una banda armada en Haití desde el pasado octubre.
“Acogemos con satisfacción los informes de que están libres y recibiendo la atención que necesitan después de su terrible experiencia”, declaró la portavoz adjunta de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, durante una conferencia de prensa.
Jean-Pierre aseguró que el Gobierno estadounidense “ha estado trabajando incansablemente durante los últimos dos meses para liberarlos”, y agradeció, en particular, al FBI, al Departamento de Estado y a las fuerzas de seguridad en Haití.
El grupo, que cumplía este jueves dos meses de secuestro, fue puesto en libertad, anunció en principio el Centro de Análisis de Investigación en Derechos Humanos (CARDH), una ONG especializada en secuestros.
La información fue confirmada por la Policía Nacional de Haití y la congregación religiosa a la que pertenecen los misioneros, Christian Aid Ministries, basada en Ohio (EE.UU.).
La portavoz adjunta señaló que el presidente estadounidense, Joe Biden, ha estado recibiendo información diaria actualizada sobre esta situación.
El pasado 21 de noviembre fueron liberados 2 integrantes del grupo y el pasado 5 de diciembre, otras 3 personas, aunque no fueron divulgadas sus identidades por motivos de seguridad.
El grupo secuestrado constaba de 17 personas, 16 de nacionalidad estadounidense y un canadiense, incluyendo los misioneros y 5 niños, familiares de estos.
Los misioneros fueron secuestrados por la banda 400 Mawozo en la zona de Croix-des-Bouquets, una barriada en las afueras de Puerto Príncipe, cuando regresaban en un autobús a casa, después de visitar un orfanato en la zona de Ganthier, cerca de la capital haitiana.
Los captores pedían un rescate de 17 millones de dólares, uno por cada uno de los secuestrados.
Además, según CARDH, habían exigido la liberación de uno de sus cabecillas, que cumple condena en la Penitenciaría Nacional.
El CARDH ha contabilizado 949 secuestros en lo que va de año, incluyendo a 55 extranjeros de cinco países. EFE