La pandemia del Covid-19 provocó un rezago educativo que se puede traducir en una pérdida de entre uno y dos años escolares en los distintos niveles.
Así lo señaló David Garza, Rector y presidente ejecutivo del Tecnológico de Monterrey, durante el Congreso Internacional de Innovación Educativa, al que asistieron expertos de México, Estados Unidos e Hispanoamérica.
“El rezago educativo es preocupante en América Latina, Algunos estudios estiman que este rezago se puede traducir en una pérdida de entre uno y dos años escolares en distintos niveles educativos”.
Garza dijo que este rezago comienza a provocar una escasez de talento, algo que en lo que deben enfocarse las instituciones educativas.
“En el Tec de Monterrey arrancamos con un programa piloto en donde estamos apoyando a más de 3 mil 500 estudiantes de nivel medio superior”, indicó Garza.
Expresó que a través del servicio social de sus estudiantes, el Tecnológico de Monterrey apoya a estudiantes de educación media superior y de otros niveles básicos para combatir este rezago educativo provocado por la educación a distancia debido al Covid-19.
Comentó que el tema socio emocional de los estudiantes y los maestros es otro de los que preocupan a las instituciones educativas.
A su vez, Luciano Concheiro, Subsecretario de Educación del Gobierno Federal, dijo que en México hay un rezago histórico social muy fuerte con respecto a la educación y una desigualdad en los ingresos de las mujeres con respecto a los hombres.
Mencionó que las mujeres egresadas del Conalep ganan un 50 por ciento menos que los hombres egresados de este plantel educativo, lo cual no debería ser.
Además, el 40 por ciento de los municipios del país no cuentan con acceso a la educación superior.
Agregó que el Gobierno Federal está empeñado en reducir estas desigualdades mediante una redistribución del presupuesto destinado a la educación.
Durante el Congreso, que concluyó este jueves, se destacó la importancia de reflexionar sobre los grandes retos que presenta el mundo en materia educativa, tales como la brecha digital, la digitalización de contenidos, las nuevas estrategias y metodologías de enseñanza-aprendizaje y el papel de la docencia en la instrumentación de las mismas.
