Un escenario presupuestario de récord, que llega a los 23.033 millones de euros y se vuelca en la Sanidad y la Educación: así son las primeras cuentas de la presidenta Isabel Díaz Ayuso, que ha presentado esta mañana en la Real Casa de Correos. La cuantía total de los presupuestos regionales crece un 14,8 por ciento respecto a los últimos que se hicieron, es la más alta de la historia de esta autonomía e incluye fondos europeos por importe de 1018 millones, que deben llegar el próximo año.
Además de la Educación (que supera los 5.300 millones de euros de presupuesto) y de la Sanidad (que sube hasta casi los 8.800 millones), las cuentas madrileñas que ha elaborado el consejero de Economía y Hacienda Javier Fernández-Lasquetty ponen el acento en la recuperación económica y el empleo. Incluyen la rebaja de 0,5 puntos en el tramo autonómico del IRPF para todos los contribuyentes madrileños -que se aprobarán en el próximo consejo de Gobierno- y la ayuda a las madres de menos de 30 años que recibirán desde enero -500 euros al mes- para fomentar la natalidad. Habrá una partida de casi 30 millones de euros para este fin.
En materia sanitaria, sus objetivos serán la mejora de la Atención Primaria, la reducción de listas de espera -con 65 millones de euros previstos para este fin- y el inicio de las reformas en el Hospital de la Paz y la ampliación del 12 de Octubre. Va a desarrollarse también un nuevo Plan de Salud Mental y Adicciones, con prioridad en la atención de niños y adolescentes.
En cuanto a Educación, se apuesta por la Formación Profesional -con más de un 125 por ciento de incremento en la partida- y por la reducción de ratios en las aulas, que comenzará a aplicarse en septiembre de 2022. También bajarán las tasas universitarias. El presupuesto en este área aumenta un 16,4 por ciento: habrá 156 millones de euros para construir nuevos centros educativos o mejorar los actuales, y se contempla la plena implantación de la gratuidad en las matrículas de centros públicos de educación infantil en la etapa 0 a 3 años, una de las peticiones que había formulado Vox y para la que se destinan 31 millones de euros en el presupuesto de 2022.
Transportes tiene como prioridades para el próximo año acometer las ampliaciones de las líneas 3 y 11 de Metro y construir el intercambiador de Valdebebas.
El consejero Fernández-Lasquetty ha hecho hincapié en la intención de su Gobierno de seguir cumpliendo con el objetivo de estabilidad presupuestaria y con el control de la deuda, a la vez que no se suben los impuestos pero «se garantizan los mejores servicios para los madrileños». Además, ha destacado cómo en el caso de Madrid, la AIReF -Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal- da el aval al cuadro de cálculos macroeconómicos (PIB, paro, demanda, etc) sobre el que se basan estos presupuestos, y lo contrapone a lo que ha ocurrido con los Presupuestos Generales del Estado, a los que, aseguran en Sol, «le corrigen las cifras la AIREF, el Banco de España, el FMI..».
En materia de empleo, hay más de 650 millones de euros para impulsar el emprendimiento y el trabajo autónomo, y s e van a invertir 280 millones en medidas para la recuperación económica, como la eliminación de trabas regulatorias, la mejora de la competitividad en la industria o la atracción de inversiones extranjeras.
Justicia aumenta su presupuesto hasta casi llegar a los 1.000 millones, y parte de ellos se dedicarán al plan de infraestructuras y al proyecto de Ciudad de la Justicia, en Valdebebas, resucitado en esta legislatura. Habrá además más y mejores medios para los bomberos y el cuerpo de agentes forestales, y se modernizará la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112.
Otra de las prioridades es el acceso a la vivienda, para el que se destinan diferentes partidas que van a parar al plan Mi Primera Vivienda -para avalar hipotecas a menores de 35 años-, el Plan Alquila Joven, o el Plan Vive.
La Consejería de Familia, Juventud y Política Social ve incrementado en casi un 20 por ciento su presupuesto: llega a los 2.100 millones y refuerza servicios dedicados a personas mayores o dependientes, y para la atención de las víctimas de violencia de género y sus hijos. Y en materia de Cultura y Turismo, sube hasta los 279 millones de euros -un 41 por ciento de incremento- el presupuesto para promoción turística y recuperación de este sector, especialmente castigado durante la pandemia.
Por último, se incluye el 2 por ciento de subida para los funcionarios que recoge ya la Ley de Presupuestos Generales del Estado, y vuelve a repetirse, por undécimo año consecutivo, la congelación salarial de los altos cargos.
Este es el primer presupuesto de Isabel Díaz Ayuso desde que llegó a la presidencia de la Comunidad de Madrid, en 2019. De hecho, es el primero tras el que aprobó el presidente Ángel Garrido en el año 2019. Desde entonces, se ha ido prorrogando ejercicio a ejercicio, por las dificultades para alcanzar acuerdos entre los dos socios de Gobierno -PP y Cs en la anterior legislatura- y el tercer socio de investidura, Vox.
En esta ocasión, aunque el acuerdo debía ser sólo a dos bandas, entre PP que gobierna con una amplia mayoría de 65 escaños, y Vox, que cuenta con 12 votos, todavía no ha llegado la 'fumata blanca' para este pacto. Tras semanas de negociación, las conversaciones no han llegado a fin y se continuará con ellas hasta el último momento, durante el periodo de tramitación parlamentaria de las cuentas regionales para 2022. Vox fuerza así la máquina intentando conseguir, a cambio de las cuatro abstenciones que necesita el PP para sacar adelante sus presupuestos, arrancarle alguna concesión al Ejecutivo de Ayuso.