El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) informó este lunes que ofreció una nueva plaza de trabajo a la persona que denunció acoso y hostigamiento sexual por parte de un funcionario.
“Ante la revictimización no deseada que pudiera derivarse de la terminación de la relación de trabajo de la persona denunciante, se le ha ofrecido su reincorporación al IFT en una plaza de estructura de igual nivel en un área de adscripción diversa, ofrecimiento que fue aceptado y que se concretará en breve”, aseguró el instituto en un comunicado.
El órgano explicó que revisará a fondo y que reforzará las medidas y mecanismos de prevención implementados con acciones adicionales, como la actualización del protocolo de atención a casos de violencia, de acuerdo con los estándares más altos en materia de derechos humanos.
Además, dijo que revisará la creación de un grupo de trabajo integrado, en un primer momento, por mujeres, quienes se podrán auxiliar de especialistas en la materia para asesorar los procesos que lleva a cabo el regulador.
El grupo de trabajo entregará informes trimestrales al pleno y a la presidencia del instituto. En el desempeño de sus tareas mantendrá comunicación y solicitará opiniones de la asociación civil CONECTADAS, liderada por Elena Estavillo, excomisionada del IFT y directora de Centro-i.
Hace días, una trabajadora del IFT denunció que Manuel Alejandro Hernández Mexia, director general de Supervisión y Verificación de Regulación Asimétrica del IFT, la había acosado sexual y laboralmente desde 2020, cuando empezó a desempeñarse como directivo en el instituto
“Ella trabajó en el IFT desde su creación y nunca había tenido un problema administrativo ni de otro tipo. Pero desde 2020 que fue nombrado Manuel Alejandro Hernández Mexia como director general de Supervisión y Verificación de Regulación Asimétrica, su vida (y en cierto grado la de más personas) ha sido un suplicio por el acoso sexual y laboral que ella ha recibido por parte de su superior jerárquico”, detalló el comunicado.
La trabajadora denunció a Manuel Alejandro Hernández ante el Comité de Prevención y Atención de Casos de Violencia del IFT, luego de que por meses fuera acosada, hostigada y amenazada por el directivo, sin embargo, ella fue cesada de su lugar de trabajo.
