Interior creará grupos específicos para los delitos de odio en las unidades de información de la Policía y la Guardia Civil. Es una de las medidas que se han decidido incorporar al Plan de Acción de Lucha contra los Delitos de Odio en la reunión de la comisión de seguimiento del mismo que ha presidido este viernes Pedro Sánchez. La convocatoria de ese órgano -encargado de diseñar la estrategia 2022-2024 de lucha contra esos delitos que experimentan un alza en España en los últimos años- se produjo tras la denuncia de una presunta agresión homófoba en Madrid que luego resultó ser falsa.
La creación generalizada de esos grupos para los delitos de odio es una de las medidas de ese plan que tendrá en la asistencia y el apoyo a las víctimas una de sus principales prioridades con medidas que, según la nota de prensa difundida por el Ministerio del Interior tras el encuentro, todavía tienen que concretarse. En la investigación de la denuncia producida esta semana y que acarreó la convocatoria urgente de la reunión se incorporaron agentes de la Brigada Provincial de Información de la Policía, que es un grupo especializado en terrorismo y delitos de organizaciones radicales y que se encarga también de los delitos de odio.
La Secretaría de Estado de Seguridad dictó recientemente una instrucción, a raíz del crimen en A Coruña de Samuel Luiz, sobre las investigaciones de delitos de odio que se aplicó desde el primer momento en el caso de la denuncia de la agresión en Madrid. Esa instrucción indicaba que en el caso de que aparezca un solo indicativo que apunte a una agresión por discriminación debe enfocar la investigación policial desde su inicio a esclarecer si es un delito de odio.
El Gobierno se esfuerza en reclamar que la resolución del caso del barrio de Malasaña no se use para negar el incremento de la violencia homófoba. Los delitos de odio experimentan un crecimiento del 9% anual desde el año 2014, según el Ejecutivo. "Esa denuncia falsa no puede impedir describir lo que es verdad, la realidad que sufren por desgracia personas de distintas orientaciones sexuales por el hecho de ser como son", expresó el presidente este jueves.
Además de mejorar la capacidad de investigación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado así como su formación y sensibilización con ese tipo de delitos, Interior apuesta por reforzar sus "mecanismos de coordinación" con las policías autonómicas y locales. "Se incidirá en la prevención del delito mediante el desarrollo de herramientas de evaluación de riesgo, un procedimiento que ya se aplica en el sistema VioGén de Seguimiento Integral en los casos de Violencia de Género", señala la nota, que también apunta que la comisión de seguimiento ha aprobado el aumento de recursos personales -que no detalla- de la Oficina Nacional de Lucha contra los Delitos de Odio, creada en 2018.
Interior también recalca la colaboración con el tercer sector en la implementación del primer plan de lucha contra los delitos de odio y se compromete "a incentivar aún más su participación y a escuchar sus propuestas".
En la reunión presidida por Sánchez han estado presentes, además de Grande-Marlaska, y el secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez, los dirigentes de la Oficina de Nacional de Lucha contra los Delitos de Odio y mandos de Policía Nacional y Guardia Civil. También han participado Boti García, directora general de Diversidad Sexual y LGTBI, del Ministerio de Igualdad; Fernando Rodríguez, coordinador contra los delitos de odio y discriminación de la Fiscalía de Sala; Karoline Fernández, directora del Observatorio Español Contra el Racismo y la Xenofobia; Carlos Daniel Casares, secretario general de la FEMP; Esteban Ibarra, del Consejo de Víctimas de Delitos de Odio; Ana Blanco, del Observatorio para la Libertad Religiosa; Uge San Gil, presidenta de la Federación Española de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales; Luis Cayo, presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI); y Rufino Tirado, de LGTBIpol, Agentes de la Autoridad por la diversidad.