Como en la política no hay coincidencias, en la narcopolítica tampoco, porque es obvia por notoria la reanudación de la comisión de delitos del fuero común y de alto impacto, los que habían cesado en la víspera de las elecciones del 6 de junio.
Los delincuentes estaban encuartelados y sus jefes muy ocupados en realizar golpes de impacto con alta precisión, por sus efectos sociales y emocionales, dirigidos en puntos estratégicos contra candidatos a alcaldes, principalmente.
Cesaron, por “obra de la casualidad”, los asaltos carreteros contra el transporte de carga y de particulares, incluso aquellos delitos del fuero común, como el asalto a usuarios del transporte urbano de pasajeros en la zona metropolitana.
Posterior a las elecciones locales y federales del domingo 6 de junio, los grupos delictivos relacionados a los del fuero común y de alto impacto, se reanudaron con un despliegue de mayor movilidad.
Uno de los actos delictivos de mayor impacto fue el ocurrido la noche del miércoles en la carretera del Arco Norte, en los límites con el estado de Tlaxcala, pero en la vía que conecta a Puebla.
Más de 15 delincuentes armados realizaron un multiasalto en agravio de 40 conductores de vehículos, entre automovilistas y choferes del transporte de carga, en el tramo de Sanctorum-Texmelucan.
En ese punto carretero, la altura del kilómetro 215 del Arco Norte con dirección a Apan, Hidalgo, el grupo delictivo instaló un retén, haciéndolo pasar como un “accidente” para detener el tránsito de vehículos y proceder a cometer el asalto.
La forma de delinquir, instalando retenes, corresponde al mismo perfil de la delincuencia que opera en tramos carreteros estados norteños como Nuevo León y Tamaulipas.
En el estado de Puebla son varios los puntos carreteros, tanto vías federales como autopistas de cuota, que están bajo el dominio de la delincuencia, principalmente, en las vías carreteras de conexión con el estado de Veracruz.
No habían pasado ni 10 días de las elecciones del 6 de junio y los delincuentes reactivaron sus fechorías, como ocurrió en la federal a Xalapa a la altura de San Sebastián Villanueva, con el asalto al camión de valores del que despojaron 1.5 millones de pesos. Casualidades, es pregunta.
Pablo Ruiz
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