Después de un año marcado por el COVID-19, los niños necesitan asistir a un campamento de verano más que nunca. Las empresas que organizan este evento, como Aventurarte, han adaptado todas las medidas sanitarias necesarias para llevar a cabo los campamentos con seguridad.
Esta empresa española de tiempo libre y ocio, ubicada en La Gran Vía de Hortaleza de Madrid, ha planteado las actividades de manera diferente respecto a los años anteriores, ya que se han incorporado todas las medidas sanitarias requeridas.
Los padres de los niños, adolescentes y jóvenes que participen en los eventos de Aventurarte pueden sentirse tranquilos, porque la empresa siempre ha realizado sus programas orientados a evitar inconvenientes y, esta vez, sus organizadores han contado con más de un año para cumplir con las normas de prevención a las que deben adaptarse todos.
Entre las medidas que se plantean, la prueba de COVID-19 es necesaria tanto para los campistas como para todo el personal del campamento. Además, el uso de la mascarilla será obligatoria para todos durante todos los días. Del mismo modo, el lavado de manos será constante y se evitará rigurosamente abrazar y besar, así como usar los mismos instrumentos para beber y comer. La empresa asegura que “Estamos seguros de que pueden disfrutar del campamento de verano en total libertad y sin riesgos, siempre y cuando las normas y reglas dictadas al comienzo de cada campamento, sean ejecutadas correctamente”.
Conectar con la naturaleza, respirar aire puro, conocer nuevas personas, divertirse y aprender son algunas de las ventajas más conocidas que se obtienen de participar en un campamento de Aventurarte.
Cuenta con dos localizaciones diferentes, en Guadalajara y Segovia. Este año, bajo la propuesta temática de ¡La vuelta al mundo!, los campistas podrán disfrutar de múltiples actividades multiaventura, adaptadas a la edad de los niños.
La empresa cuenta con monitores formados en el área del ocio, con el objetivo de promover que los pequeños se desinhiban, participen y aumenten su inteligencia emocional. Además de activar sus cuerpos y recrearse, se busca que consoliden valores como el compañerismo, la solidaridad, el respeto, la diversidad, el cuidado del medio ambiente y potencien la interdependencia y la responsabilidad, tanto individual como de grupo.
Los campamentos de verano son una herramienta dinámica para seguir fomentando el crecimiento de los más pequeños con métodos más dinámicos. Empresas como Aventurarte se adaptan a la situación sanitaria actual para que los más pequeños puedan desconectar de la rutina y disfrutar del verano de la manera más segura posible.
