La mitad de los miembros del Gobierno valenciano dejarán vacíos sus escaños en las Cortes Valencianas este miércoles. Seis de los once consellers de Ximo Puig no acudirán al pleno convocado porque sus agendas oficiales se solapan con otros actos en los que se requiere su presencia, con el perjuicio que ello supone para la labor de fiscalización que realiza el parlamento autonómico.
Los titulares de Hacienda, Vicent Soler; Economía, Rafa Climent; Transparencia, Rosa Pérez Garijo; Sanidad, Ana Barceló; Movilidad, Arcadi España y Agricultura, Mireia Mollà, se ausentarán del hemiciclo. Además, estos tres últimos tampoco estarán el jueves en la sesión de control al presidente, a los que se sumará también la consellera de Justicia, Gabriela Bravo.
Una situación que se volverá a repetir la próxima semana. Vicent Marzà, de Educación, viajará el miércoles a Polonia por la final de la Europa League en la que juega el Vila-real y Barceló volverá a dejar libre su escaño porque se celebra el Consejo Interterritorial de Sanidad. Del mismo modo, la vicepresidenta, Mónica Oltra, no acudirá al parlamento el jueves que viene porque tiene programado un encuentro con la Fiscalía para abordar la trata de blancas.
Las críticas por parte de la oposición se han sucedido por lo que consideran un ataque al legislativo, puesto que los grupos parlamentarios no podrán interpelar a los ausentes en sus intervenciones. Sin embargo, los socios del Botànic, PSPV y Compromís, han rebajado el tono respecto a los últimos días y han justificado a sus compañeros de partido, después de que sus respectivos portavoces se mostraran muy críticos con una situación que, consideraban, no podía convertirse en la tónica habitual.
«Si no vienen no es porque no les da la gana», ha defendido el síndic socialista, Manolo Mata, aludiendo a la etapa en la que los miembros de Gobiernos del PP «faltaban una semana sí, otra no, e incluso cogían helicópteros para asistir a partidos de fútbol donde no jugaba ningún equipo valenciano».
«Si hubieran preguntado se lo habríamos dicho», ha apuntado la portavoz adjunta de Compromís, Aitana Mas, en referencia a las críticas recibidas desde los grupos de la derecha. «No es una cuestión que se esconda. O ya lo sabían o no les ha interesado», ha añadido.
Explicaciones que no satisfacen a la nueva síndica del PP, Eva Ortiz, que entiende que haya reuniones urgentes, pero ha recordado que la fecha de los plenos se fija con «mucha antelación». «Decir que no viene sin explicar por qué no es de recibo», ha señalado.
Ruth Merino, de Ciudadanos, ha coincidido en exigir que se justifiquen debidamente las ausencias de los consellers para «dejarlos en evidencia», mientras Vox ha ido más allá. La síndica de la formación de extrema derecha, Ana Vega, ha presentado un escrito para protestar por lo que entiende que es una «burla» a la institución para dificultar el control al Gobierno.