En la actualidad, gracias a los increíbles avances en cirugía protésica existen diferentes tipos de prótesis de pene
Sin duda alguna, el mundo de la cirugía protésica ha dado pasos de gigante en los últimos tiempos, algo que se puede ver reflejado en algunos recursos terapéuticos como la prótesis de pene. Para los que lo desconozcan, esta cirugía es ideal para tratar la disfunción eréctil, puesto que se lleva a cabo un procedimiento que no genera complicaciones, de manera que el grado de satisfacción de los pacientes es muy alto.
Según indican diferentes estudios médicos, la disfunción eréctil empieza a acentuarse en la población masculina adulta a partir de los 60 años, y por lo general, suele afectar a más del 20% de los hombres que se encuentran en ese tramo de edad. Por ello, desde el campo de la cirugía protésica se han realizado grandes avances, los cuales han partido del objetivo de mejorar los tratamientos ya existentes.
Y es que la medicación oral y las inyecciones intracavernosas han fracasado, de modo que la población masculina necesitaba un nuevo recurso terapéutico para hacer frente al problema de la disfunción eréctil. Por suerte, hoy en día, la prótesis de pene es una auténtica realidad de la que cada vez se benefician más hombres. Si quieres saber más sobre esta cirugía, puedes ver qué tipos hay en Protesisdepene.es.
Probablemente, te estés preguntando ¿qué es una prótesis de pene?, y más en concreto, qué tipos hay disponibles actualmente en el mercado. Como ya se ha comentado antes, la prótesis de pene se ha convertido en una excelente solución para combatir la disfunción eréctil, ya que a través de este implante, los pacientes pueden volver a disfrutar al máximo de la vida sexual.
Hoy en día, existen diferentes tipos de prótesis de pene, ya que por un lado están las prótesis de pene maleables, las cuales también reciben el nombre de implantes semi-rígidos. Por otro lado, están las prótesis de pene hidráulicas integradas en tres componentes. Es decir, este segundo tipo está compuesto por dos cilindros, un mecanismo de activación y un reservorio.
Las prótesis de pene maleables son parcialmente rígidas, puesto que en su interior cuentan con un trenzado metálico de plata y cobre. Por su parte, las prótesis hidráulicas permiten aumentar o disminuir la rigidez en función de la necesidad del paciente, ya que consisten en un sistema hidráulico que mueve el líquido entre los diferentes componentes que se han mencionado antes.
Obviamente, para llevar a cabo la implantación de una prótesis de pene se requiere cirugía, debido a que es necesario realizar una pequeña incisión en el escroto. Aunque en España se han realizado grandes avances en este ámbito, la realidad es que otras naciones como Estados Unidos están por delante, ya que tal y como indican desde Gaceta Médica, el implante de prótesis de pene es 10 veces menor en nuestro país.
Esta importante diferencia guarda una estrecha relación con la falta de información, puesto que en muchos casos, la población masculina desconoce los beneficios de la prótesis de pene. Y es que este tratamiento es muy seguro, algo que se puede ver reflejado en el enorme nivel de satisfacción de los pacientes que se someten a este tipo de cirugía, los cuales pueden volver a disfrutar de la sexualidad.
Según indican los centros clínicos especializados en prótesis de pene, más del 90% de los pacientes sometidos a esta cirugía protésica se muestran muy satisfechos, hasta el punto, de que todos ellos escogerían este novedoso tratamiento una vez más. Y es que si la intervención transcurre con total normalidad, los hombres pueden volver a mantener relaciones sexuales en un periodo máximo de 6 semanas.
Todo depende de cada paciente, pero por lo general, el postoperatorio suele durar unas 2 semanas, por lo que pasado este tiempo se puede volver a hacer vida normal. Eso sí, durante las 2 semanas posteriores al implante de una prótesis de pene, las personas deben utilizar ropa interior adecuada y aplicar hielo con un paño en la zona intervenida. Si aparece alguna molestia, siempre se puede prescribir algún tipo de antiinflamatorio.