En 1522, la pérdida del tesoro de Moctezuma a manos de corsarios franceses fue una calamidad para los intereses del Imperio español, de eso no hay duda. Pero, para el director Antonio P. Molero y su equipo, tuvo su lado bueno: retorció las tripas de Carlos I hasta tal punto que el buen monarca buscó un mecanismo que asegurara, de una vez, las comunicaciones entre el Viejo y el Nuevo mundo. El resultado fue el alumbramiento de la flota de Indias, una suerte de sistema de convoyes que, cual fortaleza marítima, protegía el traslado de las riquezas y mercancías a través del Atlántico. O, como indica el conquense a ABC, «el cordón umbilical que unió Europa con América y, a...
Ver Más