La presidenta eslovaca, Zuzana Čaputova, expresó el domingo su apoyo a las acciones de la República Checa, cuyas autoridades decidieron expulsar del país a 18 empleados de la embajada rusa, vinculando este paso con una explosión en un depósito de municiones en el pueblo de Vrbetice, cerca de la ciudad de Zlín (este de la República Checa) en 2014. Las palabras del jefe de Estado fueron citadas por Slovak Radio .
«Eslovaquia está observando de cerca las presuntas acciones subversivas de los servicios especiales extranjeros [contra la República Checa], como resultado de las cuales murieron personas y se produjo una gran destrucción en Vrbetica. Apoyamos a la República Checa y las medidas que ha tomado», dijo Czaputova. .
El jefe del Ministerio de Relaciones Exteriores de Eslovaquia, Ivan Korchok, habló en la misma línea el domingo.
El incidente en Vrbetica
El 16 de octubre de 2014, 50 toneladas de municiones explotaron en Vrbetica. Sus fragmentos se encontraban esparcidos en un radio de 800 m desde el lugar donde se ubicaba el edificio del almacén. Dos empleados de la empresa local Grupo Imex, que alquilaba un almacén al Instituto Técnico Militar estatal, resultaron muertos. Todos los habitantes del pueblo fueron evacuados de forma urgente.
El primer ministro checo, Andrei Babish, y el primer viceprimer ministro, Jan Hamacek, anunciaron el sábado la deportación de 18 empleados de la embajada rusa en Praga, quienes, según la parte checa, son «funcionarios de los servicios especiales rusos del SVR y GRU». Este paso se tomó en relación con las circunstancias reveladas de la explosión en Vrbetica. Según los políticos, «oficiales de la inteligencia militar rusa del GRU» están involucrados en él.
Al comentar sobre las acciones de las autoridades checas, Leonid Slutsky, presidente del comité de asuntos internacionales de la Duma Estatal, dijo que la República Checa «sigue el canal rusofóbico» de Estados Unidos, expulsando a los diplomáticos rusos. Los motivos no resisten el escrutinio, así como las referencias a los hechos de 2014, enfatizó.
A su vez, la representante oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, dijo que «Praga es muy consciente de lo que seguirá a esos» trucos «.
