Según ha informado la policía catalana, los hombres, de entre 22 y 50 años, fueron detenidos el pasado martes, acusados de delitos contra la salud pública y defraudación del fluido eléctrico, dado que tenían pinchada la luz que utilizaban para el cultivo "indoor" de la marihuana.
La operación, en la que también fue denunciada una mujer de 30 años, se inició al descubrirse que en un bloque de viviendas de la calle Río Túria de El Prat se cultivaban plantaciones de marihuana.
Con las correspondientes órdenes de entrada y registro del juzgado, los agentes inspeccionaron el edificio y descubrieron cuatro plantaciones, con 600 matas en total, además de intervenir 1,5 kilos de cogollos preparados para ser transportados y 70 gramos de hachís, lo que en total podría alcanzar un valor de 142.000 euros en el mercado negro.
Los agentes intervinieron también a los detenidos 4.800 euros, presuntamente obtenidos mediante la venta de droga, así como una pistola de aire comprimido, munición diversa y un arma de fuego real, con dos cargadores y 20 cartuchos.
En las viviendas registradas residían varios menores en malas condiciones de habitabilidad, debido a que la mayoría de estancias -comedor, habitaciones y hasta lavabos- se destinaban al cultivo de la marihuana.
Asimismo, se ha calculado que el fraude de fluido eléctrico por tener la luz pinchada para el cultivo "indoor" asciende a 26.000 euros.
Los detenidos han quedado en libertad provisional, tras pasar a disposición del juez, y la operación se mantiene abierta, sin que se descarten más arrestos.