La Subdelegación del Gobierno ha informado este viernes de que el empresario, dedicado a la maquinaria industrial, presentó una denuncia en la que daba cuenta de la realización de dos transacciones financieras fraudulentas, por importe total de 863.968 euros, que ponía en grave riesgo la viabilidad de su negocio.
Ante estos hechos, desde la Comisaría de Policía se activó una serie de gestiones urgentes tendentes a recuperar el dinero estafado al empresario, tanto en el ámbito nacional como internacional, y los agentes consiguieron a través de las entidades bancarias afectadas inmovilizar el envío del dinero.
El rápido desarrollo de los acontecimientos hizo difícil el rastreo del dinero estafado, puesto que la banda organizada de carácter supranacional operaba a través de "hackers" informáticos asentados en Lituania, país donde facilitaban los dominios para realizar efectivamente la estafa desde Holanda.
Según la Subdelegación del Gobierno, la implicación de los organismos nacionales e internacionales y las entidades bancarias ha sido fundamental para conseguir la recuperación de gran parte del dinero estafado.
En total en esta investigación se han bloqueado dos transferencias internacionales y de momento se han recuperado 663.998.71 euros de las transferencias iniciales realizadas por el denunciante por un valor de 863.968 euros.
En esta estafa informática conocida como "phishing del CEO", los ciberdelincuentes se hacen pasar por altos cargos de una empresa para solicitar a miembros de la compañía o a proveedores de la misma las transferencias, confidenciales y urgentes.
La alta sofisticación de esta estafa, dado que la suplantación de identidades y correos electrónicos es casi perfecta, llega incluso a copiar la libreta de direcciones de algunos directivos.
En algunas ocasiones llegan a introducirse en el circuito de comunicación interna de la empresa mediante "malware" espía, con lo que acceden a información y datos de carácter sensible, lo que hace más difícil sospechar al recibir este tipo de correos fraudulentos.
Como recomendaciones de seguridad para empresas, se aconseja evitar el uso del correo electrónico corporativo en dispositivos móviles e implantar procedimientos seguros para realizar pagos, con "doble verificación" e incluso llamada telefónica como comprobación final antes del pago. EFE