Juan Fornés Fornés S.A., distribuidora valenciana que opera bajo la enseña masymas supermercados, ha incrementado un 10,1 por ciento sus ventas en 2020 tras facturar 332,5 millones de euros (ventas con IVA) frente a los 302 millones del ejercicio anterior.
Para Fornés, «el año pasado fue tremendamente difícil, llegando a una situación extrema que puso a prueba nuestra fortaleza y la de todo el sector, pero supimos reaccionar y estar a la altura». «Los primeros momentos de la pandemia del coronavirus fueron especialmente complicados, con mucha presión para poder garantizar el abastecimiento», ha apuntado.
«Ha sido muy duro en cuanto al trabajo y al desafío de mantener la misma calidad en el servicio, pero la plantilla al completo ha respondido con enorme responsabilidad, de lo que nos enorgullecemos enormemente», ha añadido Fornés.
Durante el pasado año, la cadena invirtió diez millones de euros que destinó básicamente a las aperturas de dos nuevas tiendas en Dénia (Alicante) y Santa Ana (Cartagena) y a la reforma de otras siete. Actualmente, cuenta con 122 supermercados ubicados en la Comunidad Valenciana y Región de Murcia.
Al margen de estas inversiones en línea a su plan estratégico, tuvo que hacer frente a diferentes gastos extraordinarios a causa de la pandemia, por encima de los 3,5 millones de euros para implantar las medidas de seguridad en los supermercados, tanto para clientes como para empleados, así como para bonificar a sus más de 2.500 empleados con dos gratificaciones en abril y a final de año «por el sobresfuerzo y la ejemplaridad con la que han trabajado durante estos meses tan difíciles», según recalca su director general José Juan Fornés.
Para el presente ejercicio, la empresa anuncia una inversión de doce millones de euros para la apertura de dos nuevas tiendas en la Comunidad Valenciana y para la reforma de otros tres establecimientos de su actual red.
Por último, respecto a los ejes estratégicos planificados para este año, la empresa mantiene su apuesta de inversión en nuevas tiendas y mejora de las instalaciones, impulsará el producto fresco de proximidad, potenciará la digitalización para mejorar la experiencia de compra y, consciente de su importancia, continuará aportando medidas en pro del medio ambiente y la sostenibilidad.