Más de un año llevan sin prácticamente ninguna actividad, con unas pérdidas que rozan el 90 por ciento, que han llevado a que uno de cada cuatro negocios haya tenido que cerrar definitivamente. Las empresas de actividades extraescolares de Castilla y León están en la cuerda floja y lanzan un SOS para poder sobrevivir después de que a mediados del curso pasado tuvieran que frenar en seco su labor por la suspensión de las clases y aún no han podido retomar su trabajo.
«En principio, la Junta habló de que no permitiría las actividades en el primer trimestre; después, tampoco en el segundo, y ahora sólo se permiten las deportivas en exterior con un máximo de 30 alumnos y con...
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