Los usuarios australianos de Facebook ya no podrán consultar los enlaces de información de los medios locales o internacionales, mientras que las personas que viven en el extranjero tampoco podrán leer las informaciones australianas, a través de la plataforma. Los servicios de meteorología y de alertas de incendios también han sido bloqueados.
Facebook ha cumplido una amenaza que lanzó junto a Alphabet – la matriz de Google – hace seis meses cuando amenazó con suprimir “toda noticia de sus servicios”, tanto australiana como internacional, si el Gobierno continuaba con un polémico proyecto de ley que busca que los gigantes tecnológicos paguen a los medios de comunicación por usar su contenido.
La semana pasada, el proyecto de ley fue aprobado por la Cámara de Representantes de Australia y ahora se debate en el Senado. Una iniciativa que el gobierno australiano defiende a capa y espada, y que reaviva el enfrentamiento entre medios de comunicación y plataformas. Los primeros acusan a los segundos de beneficiarse de sus contenidos gratuitamente y los hacen parcialmente responsables de la actual crisis de medios; mientras que los segundos se defienden argumentando que sus plataformas dan mucho mayor visibilidad a sus contenidos, que luego se traducen en suscripciones directas a los medios de comunicación.
Frente a la respuesta de Facebook, el ministro de Finanzas, Josh Frydenberg, califico de error e innecesaria la decisión de la red social y declaró que pese a estas represalias que sientan un mal precedente para la reputación del gigante tecnológico; el gobierno está “totalmente determinado” a continuar con el proyecto de ley.
La decisión de la red social marca un antes y después, pues a este apagón de redes sociales, podría también sumarse Google, que amenazó en setiembre pasado con suprimir toda noticia de sus servicios si Australia continuaba con su proyecto.