Las motos y motocicletas se habñian convertido en el último semestre del año en una alternativa de movilidad ante el Covid-19. Pero finalmente las restricciones por la tercera ola de la pandemia y las consecuencias del paso de la borrasca Filomena por España han determinado la caída en las matriculaciones de motos y vehículos ligeros en enero del 2021.
A esto hay que añadir el efecto estadístico, también negativo, ya que enero contó con dos días laborables menos que en 2020. Adicionalmente cabe destacar que a estas alturas del año pasado aún no había llegado la pandemia. Estos cuatro factores han provocado que tan solo se hayan matriculado 9.073 vehículos, lo que supone descenso interanual del 39,2%, según la Asociación de empresas del sector de las dos ruedas Anesdor.
Los datos facilitados por esta organización reflejan que la mayoría de los segmentos del mercado han presentado datos negativos. El de motocicletas ha caído un 37,5%, el de ciclomotores un 58,8%, el de triciclos un 44,1%, el de cuatriciclos ligeros un 11,8%. La única buena noticia es incremento de cuatriciclos pesados, que creció un 33,3%.
José María Riaño, secretario general de Anesdor, ha explicado que «ha sido un mes negativo en todos los aspectos para el sector. Las restricciones de movilidad impiden la dinámica normal de las ventas y este mes, a la COVID se ha sumado el impacto del temporal de nieve. Adicionalmente podemos constatar que el efecto fin de serie Euro5, que contribuyó a incrementar las matriculaciones en diciembre, ha actuado de forma contraria en este mes de enero».
«En el sector de la moto hay una estacionalidad marcada y los meses de invierno son temporada baja. Igual que en 2020 la pandemia afectó de lleno al periodo de mayores ventas, confiamos en que si la situación mejora en los próximos meses el mercado retome el pulso. Es evidente que vivimos una gran incertidumbre económica a corto y medio plazo, pero todavía creemos que 2021 será un mejor año para el sector de la moto y los vehículos ligeros que 2020», ha dicho Riaño.