Las rutas vitales de transporte y comercio entre Reino Unido y Europa continental se reabrieron lentamente después de que Francia flexibilizó las restricciones fronterizas, pero el gran número de embarques pendientes, que podrían tardar días en normalizarse, provocaron tensiones en el puerto más activo de la nación británica.
Cerca de Dover, la policía se enfrentó con algunos camioneros enojados por haber estado esperando desde el sábado y que intentan llegar a casa para Navidad. Muchos están en fila para las pruebas de coronavirus que se requieren para pasar a Francia.
Francia suspendió el domingo los envíos from el puerto en el sureste de Inglaterra debido a la preocupación por una variante del covid-19 de propagación más rápida que llevó al Gobierno del Reino Unido a confinar a Londres y sus alrededores.
Eso aumenta la sensación de aislamiento económico en el Reino Unido a medida que el drama político del Brexit se acerca a su fecha límite de fin de año.
Casi 3 mil camiones se quedarán atrapados en el sureste de Inglaterra, alineados al costado de la carretera y en la pista de un aeropuerto local, un atascamiento que amenaza el suministro de algunos alimentos frescos en los supermercados británicos.
Si bien los grupos de empresas de alimentos y minoristas del Reino Unido acogieron con beneplácito la decisión de reabrir los cruces del Canal de la Mancha, también hubo una advertencia acerca de que podría haber escasez de algunos alimentos.
Los conductores deben someterse a una prueba de coronavirus y tomará tiempo despachar a los miles de camiones estacionados en las carreteras que conducen a Dover. La Federación de Alimentos y Bebidas dijo que es posible que las operaciones normales se reanuden para el Año Nuevo.
“Es esencial que los camiones se muevan”, indicó Andrew Opie, director de Alimentos y Sostenibilidad del Consorcio Minorista Británico. “Hasta que se normalicen los pedidos retrasados y la cadena de suministro vuelva a la normalidad, anticipamos problemas con la disponibilidad de algunos productos frescos”.
Junto con Francia, más de 40 países restringieron los viajes from el Reino Unido debido a la nueva cepa de coronavirus.
El miércoles, Nikkei informó que Japón suspendió todos los vuelos que provengan del Reino Unido, mientras que Filipinas suspendió todos los vuelos del 24 al 31 de diciembre. India, Hong Kong y Singapur han implementado medidas similares.
La reapertura limitada de la frontera entre el Reino Unido y Francia se produjo tras 48 horas de negociaciones políticas a ambos lados del Canal de la Mancha, justo cuando las negociaciones con la Unión Europea por el acuerdo comercial posterior al brexit se intensificó.
A menos de 10 días para que finalice el período de transición del Reino Unido con el bloque, la interrupción del suministro dio una muestra de las consecuencias potenciales que Gran Bretaña podría enfrentar en sus fronteras en 2021.
El Ejército británico y el Servicio Nacional de Salud establecerán múltiples sitios de pruebas en Kent, el condado donde se encuentra Dover, informó Sky News. Las nuevas restricciones de viaje que requieren un resultado negativo del virus se aplicarán al menos hasta el 6 de enero, dijo el Gobierno francés.
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