El Real Valladolid se vuelve de Granada, un feudo en el que esta temporada nadie habia ganado, con tres puntos en el zurrón gracias a la victoria por 1-3 en un partido donde los de Sergio González vencieron y convencieron, con una gran versión de lo que este equipo es capaz de hacer, sólido y seguro en defensa, persistente en ataque. Plano, Marcos André y Jota, en su debut, fueron los autores de los tantos.
Desde el inicio el Pucela demostró que, efectivamente, atrás han quedado los titubeos del inicio de temporada. En el Nuevo Los Cármenes, ante un equipo que llegaba como quinto clasificado a esta décima jornada de LaLiga, los blanquivioleta comenzaron con una clara ocasión de Óscar Plano que, tras un pase de Guardiola al hueco, erró el mano a mano ante el portero local. Los visitantes ambicionaban la victoria y eso se tradujo al césped, aunque el Granada con el paso de los minutos generó algo de peligro en aproximaciones lejanas de Luis Milla o de Machis.
Guardiola en el 44' la tuvo pero su disparo se marchó cruzado, y un minuto después llegó la más clara para los andaluces en una falta botada al segundo palo a la que llega Germán para, con la punta de su bota en el área pequeña, contactar con el balón y mandarlo muy cerca del palo, pero fuera. Cuando el descuento de la primera mitad agonizaba llegó el premio para el Real Valladolid, con un balón que controla Marcos André en la frontal, abre para Guardiola y este, casi desde el córner, saca un centro perfecto para la anticipación de Plano, quien apareció con velocidad en el primer palo y mandó de cabeza el balón a la cazuela.
Saber aguantar, saber finiquitar
Había conseguido el Pucela el primero de los hitos hacia la victoria, adelantarse en el marcador. Y aunque en el primer minuto tras la reanudación el Granada dio muestras de inconformismo ante el 0-1, y de hecho Bruno llegó salvador en el área para evitar el gol de Jorge Molina en una de las primeras jugadas, pronto fueron los visitantes quienes demostraron que, esta vez, no habría errores.
Orellana en el 48' dispuso de una buena ocasión pero su disparo golpeó el lateral de la red. Fue el aviso para lo que vendría en el minuto 54, una jugada veloz tejida entre Guardiola y Plano para que el '10' metiese en profundidad un pase para Marcos André. El delantero encaró el uno contra uno con el defensa, se metió en el área, salió por la izquierda y cruzó el disparo con tal puntería y potencia que ni la mano de Rui Silva evitó que se convirtiese en el 0-2.
Ahí sí el Granada pasó a dominar. Y apareció la versión del Real Valladolid que ha constituido la esencia estas dos temporadas pasadas, la de la defensa inquebrantable. Otro tras otro la zaga repelía los balones que llegaban principalmente con centros laterales; y aunque Domingos Duarte hizo el 1-2 en la salida de un córner los vallisoletanos no dudaron ni se pusieron nerviosos.
En el minuto 76 Sergio González introdujo en el campo a Toni Villa, Javi Sánchez y Jota, quien tuvo sus primeros minutos, y el Real Valladolid buscó a la contra la sentencia, mientras atrás aguantaba el empuje local. De esta forma, ya en el 90', fue el internacional Sub 21 portugués quien robó a Luis Milla un balón, siendo este el último defensor, y batió por bajo al guardameta para certificar el triunfo.
Son nueve los puntos que acumula el Real Valladolid tras estas diez jornadas, que permiten salir de los puestos de descenso con dos por encima del antepenúltimo clasificado, el Levante UD que precisamente es el próximo rival en el partido que tendrá lugar el viernes 27 de noviembre, a partir de las 21.00 horas, en el Estadio José Zorrilla.