La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, ha supervisado a primera este miércoles el estado final de las obras realizadas en el Paseo de Recaredo durante las dos últimas semanas a propósito de la localización de fugas en la conducción general de abastecimiento por parte de Tagus que provocaron el pertinente corte de tráfico en la zona y que este 20 de agosto, dejará de tener efecto.
La primera edil estuvo acompañada en su visita por la portavoz y edil de Obras, Noelia de la Cruz; el edil de Movilidad y Seguridad Ciudadana, Juan José Pérez del Pino; el jefe de la Policía Local, José Luis Martín Mora; y el gerente de Tagus, Luis Soto, entre otros.
La apertura del tráfico está prevista a partir de las 07:00 horas, tal y como había sido anunciado al inicio de las obras, lo que permitirá que los autobuses urbanos (líneas 2 y 12) realicen sus itinerarios establecidos de forma ordinaria. Según recordó la edil de Obras, esta actuación surgió en el marco de los trabajos de detección de fugas que tuvo lugar el pasado mes de julio por parte de los operarios de Tagus.
Las tareas de mantenimiento y conservación, que permiten anticiparse a averías y roturas, motivaron en este caso la localización de una fuga en el Paseo de Recaredo, concretamente en la conducción general de abastecimiento de fundición gris de DN-450 mm que da suministro de agua potable al barrio del Casco Histórico.
De esta forma, en los trabajos de reparación se observaron varios poros en una pieza realizada en calderería, que en forma de chimenea de siete metros de longitud conectaba la conducción desde la parte inferior de la muralla hasta la parte superior del paseo y que se encontraba completamente hormigonada.
Si bien, inicialmente los poros fueron subsanados, posteriormente se vio que había alguno más en la parte inferior de la pieza por lo que, una vez valorada la situación, el estado, antigüedad de la conducción y la ubicación de la misma, en uno de los principales accesos al Casco y próxima a la muralla, se optó por sus sustitución por piezas estandarizadas para garantizar la duración de la reparación efectuada.
A partir de ese estudio, el Ayuntamiento coordinó un dispositivo con Policía Local que ha permitido que en estas dos semanas el tráfico haya sido redirigido mediante semáforos en la puerta del Cambrón y la alternativa para acceder al entorno de San Juan de los Reyes y el paseo del Tránsito haya sido por el paseo de Cabestreros, Carreras de San Sebastián y calle Descalzos.
De otro lado, para ofrecer total garantía en el suministro de agua a los vecinos, Tagus aisló el tramo de conducción afectado y ha abastecido durante este tiempo al Casco histórico a través del grupo de presión instalado en San Juan de los Reyes «para que ningún abonado haya quedado desabastecido durante la intervención».
Finalmente cabe destacar que esta actuación, próxima a la muralla, ha sido coordinada también con el servicio de arqueología del Ayuntamiento y ha sido completada este mismo miércoles con el repintado de la zona de la ORA por parte de EYSA, empresa concesionaria.