El Gobierno ha abierto la puerta a que las autopistas de peaje quebradas sigan en manos públicas al menos hasta el año 2023. La propuesta del Ministerio de Fomento es que Seitt extienda el convenio para gestionar estas carreteras, entre las que se incluyen las radiales de Madrid, durante cuatro años, el plazo máximo legal. Aunque el ministro José Luis Ábalos ha asegurado en reiteradas ocasiones que no cierra la puerta a la privatización de estas vías, todo apunta a que esta cuestión no será abordada en ningún caso en la legislatura presente.