Dia ha empezado a movilizarse para hacer frente a la amenaza de opa por parte del magnate ruso Mijaíl Fridman, propietario ya de un 29% del capital. La cadena de supermercados que dirige Antonio Coto ha encargado a Morgan Stanley y Rothschild que busquen un caballero blanco que acuda a la ampliación y sustituya a LetterOne, la sociedad de inversión de Fridman, como accionista de referencia de la compañía. Según fuentes próximas a la operación, la compañía ha despertado ya el interés de varios fondos de capital riesgo, que estarían analizando su posible desembarco.