Al Ing. José Antonio Quintana Fernández
Tonantzin: “Nuestra Madre”, “Nuestra Madre Venerada”, “Nuestra Madrecita”, es la acepción en mexicano. “Tonāntzin (en náhuatl: tonantzin, ‘nuestra madre venerada’‘to, nuestro; nāntli, madre; tzīntli, diminutivo reverencial’)” (García, Minerva).
Con ella, se ha significado la referencia a la Virgen de Guadalupe, Patrona de México, adorada y venerada por todo su pueblo (no sólo del estado de México, como los traviesos duendes de la redacción escribieron en mi anterior colaboración) y, además, reconocida y aceptada como Emperatriz de América.
Reiteraré que en la advocación y devoción a la Virgen María en nuestro país, sobre todo en el mundo católico (me atrevo a considerar que en mucha gente que no es de esta religión, también cree en la Virgen) es muy singular. Solamente en estos pasados días antes y después del 12 de diciembre del año en curso, más de 10 millones de fieles visitaron el Santuario de la Virgen Morenita del Tepeyac. Bien decía el periodista y sacerdote jesuita, Enrique Maza: “Ya nos han usurpado y saqueado a nuestra Patria. Nos han contaminado de corrupción y casi destruido a las Instituciones. Ya lo único que nos queda es la Virgen de Guadalupe. ¡Por favor déjenos a nuestra Madre, María de Guadalupe, refugio y consuelo de todos los mexicanos!”. Y Enrique Maza completaba, declarando: “cada pobre, con su matiz propio de miseria, es recuerdo y como sacramento del Gran Pobre, Jesucristo, quien siendo rico se hizo pobre, para hacerlos ricos con su pobreza” (Meyer, J. “Letras Históricas”, CIDE, No. 13, México, 2016). Como también dijimos, el Santuario a la Virgen de San Juan de Los Lagos, en el Bajío mexicano y afectando a la zona norte del país así como con la frontera a los EEUU, afecta y protege a los devotos de la Virgen María en esta personificación desde el estado de Jalisco. Y, en la comunidad de Juquila, Oaxaca, como igualmente lo señalamos-la Santísima Virgen de Juquilita es la Virgen María venerada y socorrida pos los creyentes del sur de la república mexicana y de algunos países de la América Central.
Y, en el presente, como les compartimos, haremos los apuntes que la familia de D. Adrián Martínez Carrión y Dña. Socorrito Arias Gómez nos platicaron sobre la peregrinación que, mandatados por la suegra y mamá, respectivamente, Sra. María Elena Gómez, la iniciaron desde hace más de 30 años. Y, que como una de sus primeras consecuencias fue la creación del primer altar- monumento a “La Juquilita” en Granjas de San Isidro hace 25 años, cuya estructura metálica fue obsequio del vecino Francisco Caínceros a la comunidad y así instalar el primer Nicho dedicado a la patrona oaxaqueña en la ciudad de Puebla. Dice el matrimonio Martínez Arias: “Salíamos en tren de Puebla, a las 12 de la noche y llegábamos a la ciudad de Oaxaca, entre 8 y nueve de la mañana”. “De ahí, tomábamos la única corrida que iba a Juquila por camino de terracería y hacíamos casi 10 horas de carretera. Los alimentos y el sueño los compartíamos de la mejor manera posible. Una vez allá, frente al Santuario, nos acomodábamos donde y como mejor podíamos. Cuidábamos que los niños estuvieran instalados de la mejor forma. A rezar y a llevarle a la Santísima Virgen de Juquila los presente y regalos sencillos, pero que con mucha fe y con mucho gusto le llevábamos. Eran dos o tres días de convivencia y oraciones con la virgencita y, después, de igual forma, venía el regreso. A los 5 años de ir, Dña. Ma. Elena Gómez, mi suegra, nos convenció de adquirir la imagen del virgencita, ya bendecida y con indulgencias que vendían en el Santuario principal”. “Así lo hicimos y es la imagen que nos trajimos para el nicho-altar de Granjas de San Isidro y que, del 15 de febrero se va en un lugar especial del autobús a visitar su otro santuario oaxaqueño. Es la que tiene su lugar seguro. La ponemos a un lado del altar principal y mientras nosotros nos vamos a Puerto Escondido con todos los peregrinos que nosotros coordinamos, Ella se queda de visita y nos espera a que pasemos por Ella, al regreso ya para Puebla”. “Vamos unas 70 personas a la peregrinación-excursión, ya contando a nuestra Virgencita de Juquilita-San Isidro”.Francisco I, la declaró: “María modelo y guía en el camino de la fe” y efectúo la Coronación de la Señora de Juquila y su Santuario, en el mes de febrero de 2014 y reafirmando, desde antes, la devoción a Ella, en un acto pontifical anter ior de “Reconciliación y Paz”, el 8 de octubre de ese mismo año, como preámbulo a su coronación. Juquila y su Santuario, pertenecen a la Arquidiócesis de Antequera, y su titular es Monseñor José Luis Chávez, Arzobispo de la misma. Y fue el dominico, Fray Jordán de Santa Catarina Béjar del Castañar de nombre de pila, Cristóbal, quien fundó la comunidad, el templo y el Santuario en honor a la Virgen. Su fiesta principal es, el 8 de diciembre, fecha con la que se inicia, propiamente, el puente Guadalupe-Reyes de diciembre y enero en México.