El equipo es cuarto en un exigente grupo V de la División de Honor, suma ocho partidos sin perder y aspira a clasificarse para la Copa del Rey
Tras sumar 22 de los últimos 24 puntos, la trayectoria del Real Valladolid Juvenil no pasa inadvertida para nadie. El equipo que dirige Javier Baraja ha cerrado la primera vuelta consolidado en la cuarta posición, aspira a clasificarse para la Copa del Rey, y, lo que es aún más importante, los jugadores afianzan su formación y su proyección hacia el Promesas.
El exigente grupo V de la División de Honor aglutina a las principales canteras españolas de la zona centro. Los blanquivioletas miden sus fuerzas con Real Madrid, Atlético, Rayo, Leganés o Getafe, entre otros. Y en esa pugna, el Pucela destaca.
Un total de 16 jornadas en las que se han ganado 33 puntos, gracias a 10 victorias y 3 empates. Con 29 goles a favor, es el cuarto mejor en el apartado ofensivo; y con 13 en contra también figura como una de las defensas más fiables, en tercera posición.
Gracias a esos buenos datos, el Juvenil A del Real Valladolid acaricia la opción de clasificarse para la Copa del Rey, privilegio del que disfrutan tan solo los dos primeros de cada uno de los siete grupos de esta categoría, y los mejores terceros.
No obstante, el objetivo principal del equipo es formar jugadores con la ambición de poder aportar, en un futuro próximo, al primer equipo. Y aquí también se avanza con firmeza, con el debut en el Real Valladolid B del delantero Víctor Socorro y con la participación habitual de varios juveniles en las sesiones de entrenamiento del Promesas.
Un duelo de altura
El Real Valladolid se enfrenta este domingo en Valdebebas a un conjunto que opta al título. Un campo complicado ante un equipo que sufrió para llevarse los puntos de los Anexos. Una nueva prueba para que los juveniles puedan demostrar el buen momento que disfrutan, la punta de lanza de una cantera que crece y avanza con paso firme.