Pese a lo desapacible del día y aunque en menor número que en las otras protestas, miles de salmantinos -alrededor de cuatro mil según la Policía- volvían ayer a salir a las calles de la ciudad en defensa de la Sanidad pública, para advertir del «serio peligro» que corre el sistema de salud en la Comunidad y reivindicar otro modelo sanitario, «más eficiente, integrado y coordinado».
«Salamanca por la Sanidad pública», «La Sanidad somos todos y todas, aquí no sobra nadie, aquí hace falta gente», «La Atención Primaria es prioritaria», o «Sanidad vendida, Sanidad podrida y población jodida», eran algunos de los lemas que podían leer en las pancartas que portaban los manifestantes, entre los que se encontraban numerosos dirigentes políticos de izquierda, como la viceportavoz del PSOE en las Cortes de Castilla y León, Mercedes Martín, o el líder de Izquierda Unida y procurador también, José Sarrión.
El consejero de Sanidad, Antonio Sáez Aguado, y el alcalde de Salamanca y presidente del PP de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, eran el blanco de las críticas de los manifestantes durante su recorrido por las avenidas de Alemania y de Mirat con continuos gritos en defensa de la sanidad salmantina.
Al primero, a quien culpan especialmente del «deterioro» de la Sanidad, le lanzaron hasta una docena de exigencias. Entre ellas, la mejora de las urgencias en todos lo niveles, acercar la atención especializada a los núcleos rurales, unas listas de espera públicas y transparentes, acabar con el «cierre indiscriminado» de camas hospitalarias o impulsar el desarrollo tecnológico.
Y, al segundo, al que consideran copartícipe de los recortes sanitarios en nuestra Comunidad, que informe sobre el modelo sanitario por el que apuesta desde su partido para Castilla y León.
«Algo pasa cuando en un territorio como el nuestro, donde no somos muy dados a la algarada ni a la protesta, permanentemente hay mareas y gente en la calle pidiendo que el Sistema Público de Salud vuelva a tener el rigor, solvencia y prestigio de hace 30 años «, señalaba la socialista Mercedes Martín, quien pedía a la Junta que tenga en cuenta las reclamaciones de la población y que tenga como objetivo número uno y prioritario a la Sanidad tanto en esta legislatura como en las que vengan.
Sarrión, por su parte, negaba que la crisis y los recortes en Sanidad hayan terminado «como se está diciendo», y llamaba a seguir movilizándose en la calle en defensa una Sanidad pública «que están maltratando».
