Luego de que este fin de semana la caravana de migrantes centroamericanos que intentan llegar a Estados Unidos llegaran al municipio de León, Miguel, un joven padre de familia procedente de Honduras, nos platicó la difícil realidad que viven al transitar por México en busca del sueño americano.
Durante sus declaraciones, el joven relató que en este viaje “se juegan la vida”, ya que constantemente están expuestos a la delincuencia y por este motivo muchos migrantes pierden la vida en el camino, además recalcó que uno de sus principales verdugos son los policías, ya que constantemente los “asaltan”, despojándolos de sus pertenencias.
“Hemos sido víctimas de policías con eso de que te van a revisar que por si no traes drogas y a la hora de llegar te hacen las revisiones y te hayan tu celular o tu dinero e igual te lo quitan, te despojan de tus cosas y tú no puedes decir nada porque no tienes derecho a defenderte”, comentó Miguel.
También comentó que se unió a la caravana porque es más seguro viajar en grupo, además de que él y varios de sus compañeros han buscado trabajo en México para así poder realizar su trayecto de forma más segura en autobús, pero tras ser contratados en la mayoría de las veces se les estafa, ya que al concluir las labores, para las cuales se les contrata, las personas no les otorgan ningún sueldo y los amenazan con llamar a las autoridades migratorias si no se retiran, aunque dice sentirse esperanzado ya que se entero que el gobierno Federal está planeando brindarles oportunidades laborales de manera temporal.
“Escuche en las noticias que supuestamente nos iban a dar una oportunidad a nosotros los inmigrantes, no sé cuando vaya a ser eso, hemos conseguido trabajos y nos han dado empleos algunas personas que al principio uno piensa que son buena onda y al momento que tú les trabajas, ya hay un momento que te van a pagar, te dicen te meto a migración si no te largas”, reconoció.
También hizo hincapié en que la mayoría de los migrantes solo buscan mejores condiciones de vida, que no han podido encontrar en su país natal.
“En Honduras no hay nada, para serte sincero Honduras está pasando por una situación muy difícil mi hermano, no hay trabajo de ser así nosotros no nos arriesgáramos la vida, dejar nuestro país para venir sufriendo para aguantar de todo a un país que no nos pertenece, no tener trabajo es lo que nos obliga a venir, tener una familia que alimentar”, señaló..
Mencionó que la ilusión de brindarles un mejor futuro a sus hijos es lo que lo impulsa a no rendirse en este peligroso viaje.
“Pase lo que pase dios conmigo, yo sigo pa’ delante por mis hijos por todos aquí, ya padres no tengo pero yo por mis hijos no me rindo”, dijo.
