Trece. Esa es la cantidad exacta de partidos que debe disputar un club para llegar —y ganar— la final de la Liga de Campeones de la UEFA. Seis en la etapa de grupos, más dos en cada una de las fases de eliminación directa, hacen una docena, a la que se suma el partido definitivo. El último escalón de camino ascendente que comenzara hace poco más de ocho meses, tendrá su última batalla hoy, cuando en el estadio Olímpico de Kiev choquen dos grandes de Europa: Real Madrid y Liverpool.
Entre españoles e ingleses cuentan un total de 17 trofeos que los acreditan como dos colosos dentro del máximo torneo futbolístico del Viejo Continente.
Los primeros, tras una pausa demasiado larga, han vuelto a establecer su hegemonía, gracias a las tres copas conseguidas en los últimos cuatro años. Además, en 2017 se convirtieron en los únicos que han logrado defender con éxito su corona desde que en 1992 se cambiara el formato —y el nombre— de esta competencia.
Mientras, los reds regresaron este año con nuevas fuerzas, y luego de borrar del camino a equipo de récord como el Manchester City, ahora aspiran a reconquistar un título que no alcanzan desde la trepidante final de 2005, cuando remontaron un 0-3 para imponerse en penales al poderoso Milán.
Los hombres de Zinedine Zidane llegan con la esperanza de un final feliz, luego de una primera mitad de temporada decepcionante, que resultó una inesperada eliminación ante el Leganés en cuartos de la Copa del Rey y en el tercer puesto liguero, por detrás del campeón Barcelona y de sus «vecinos» del Atlético.
Por su parte, aunque la explosiva tropa del alemán Jürgen Klopp tampoco «dinamitó» los marcos de la Premier, al quedar cuartos de la tabla, ni tampoco hizo progresos notables en las copas locales, a nivel europeo ha sido sin dudas las sensaciones de la temporada, con el trío de Mohamed Salah, Roerto Firmino y Sadio Mané como grandes protagonistas de su actuación.
La pregunta flota entonces: ¿quién se llevará la gloria? ¿«Tre-petirá» el Madrid, o dará la clarinada el Liverpool? ¿Cristiano o Salah? ¿Zizou o Klopp?
Si fuéramos a guiarnos solamente por una cuestión numérica, diríamos que los merengues son favoritos, pues de 15 finales que han jugado hasta ahora se han llevado nada menos que 12, lo que en una poco ortodoxa analogía beisbolera podría explicarse como un promedio victorioso de .800. Nada mal, ¿verdad?
Desde otra mirada, mucho más atenta a la mística y las emociones, los de la ciudad de Los Beatles partirían con ventaja. Ellos tienen el mérito de haber sido uno de los tres que con anterioridad vencieron al Madrid en un partido por la disputa de la «orejona». Fue en 1981, cuando con un gol de Alan Kennedy al minuto 82’ se llevaron el que en entonces significaba su tercer galardón.
Lo que si queda claro es este será un partido épico entre dos colosos de gran estirpe, en el cual más allá de la victoria, importa también el pundonor de las instituciones y el amor a la camiseta de los 22 que salten de inicio a la cancha. De momento, Kiev tendrá la última palabra.