La Unión Cristiano Demócrata (CDU), el partido que lidera la canciller alemana Angela Merkel, ha autorizado este lunes la reedición de la actual 'gran coalición' de Gobierno con el Partido Social Demócrata (SPD), en el marco de un congreso extraordinario celebrado en Berlín.
Tras más de cuatro meses con un Ejecutivo en funciones, el partido más votado en las últimas elecciones ha secundado el acuerdo con el SPD por amplia mayoría, de tal forma que solo votaron en contra 27 de los casi mil participantes en la asamblea de este lunes.
La votación de la CDU, sin embargo, no es definitiva. La 'gran coalición' aún depende del resultado que surja del sondeo que se está llevando a cabo entre los más de 463.000 militantes socialdemócratas y cuyos resultados se darán a conocer el 4 de marzo.
"El de hoy es un congreso importante y tiene un cometido concreto: hoy queremos contribuir a formar un Gobierno estable y con capacidad de maniobra en Alemania", ha proclamado la presidenta de la CDU durante la apertura del congreso extraordinario en Berlín. "Las esperanzas puestas en Alemania son grandes, no solo en Alemania, sino más allá de sus fronteras", ha añadido.
Por otra parte, ha lamentado la imagen que ha dado la clase política alemana en su conjunto durante los más de cuatro meses de negociaciones que fueron necesarios para acordar la formación de gobierno.
"Nadie debe llevarse a engaños sobre la imagen que ha dado la política alemana en las últimas semanas", ha aseverado. "El estilo, las maniobras y la tendencia a mirarse el ombligo que han caracterizado algunos debates, todo eso no fue ni es una página que cubre de gloria la política. La responsabilidad política no es un juego, sino que va más allá de los propios partidos", ha recordado.
EL RELEVO DE MERKEL
El congreso también ha servido para que Annegret Kramp-Karrenbauer sea proclamada como nueva secretaria general de la CDU. La jefa de Gobierno del estado del Sarre, vista como potencial sucesora de Merkel, ha abogado por líneas políticas más centristas, tal como la actual canciller.
"Ya basta de señalar a otros y decir que él o ella deberían asumir responsabilidades, por eso asumo yo la responsabilidad y me pongo al servicio del partido", ha recalcado este lunes Kramp-Karrenbauer, de 55 años.
