Marin Cilic, de 29 años, se impuso al británico Kyle Edmund, de 23, por 6-2, 7-6 (4) y 6-2 en dos horas y 19 minutos para convertirse en el primer jugador croata en lograr la final del Abierto de Australia.
El verdugo de los españoles Pablo Carreño y Rafael Nadal se enfrentará en la final contra el ganador del encuentro entre el suizo Roger Federer, defensor del título, y el coreano Hyeon Chug, de este viernes. Si es contra Federer, tendrá ocasión de vengarse de la derrota ante el helvético en la final de Wimbledon el año pasado.
El croata será el tercer jugador fuera del grupo del ‘big four’ (Rafael Nadal, Federer, Novak Djokovic y Andy Murray), en alcanzar la final de este torneo en los últimos diez años (Jo-Wilfried Tsonga, finalista en 2008, y el suizo Stan Wawrinka, campeón en 2014), algo que también podría lograr Chung si vence a Federer.
Cilic, campeón del Abierto de EE.UU. en 2014, disputará la tercera final de un grande, una menos que su compatriota Goran Ivanisevic (1992, 1994, 1998 y 2001, todas en Wimbledon), asegurándose el tercer puesto de la lista mundial, detrás de Nadal y Federer este lunes.
En su 41 participación en un grande, el gigante de Medjugorje ha aparecido en forma, desquitándose de la derrota en segunda ronda encajada el pasado año contra el británico Daniel Evans. Esta temporada había llegado a Melbourne Park después de alcanzar las semifinales de Pune (India), donde cayó contra el eventual campeón, el francés Gilles Simon. Tampoco le fue demasiado bien en la exhibición de Kooyong donde no pudo con el australiano Matthew Edben.
Edmund no pudo competir a tope. El británico nacido en Johannesburgo, se fue al vestuario al acabar el primer parcial, donde supuestamente le atendieron de problemas en la cadera. Y al regreso peleó en el desempate donde tuvo sus opciones. No obstante, sus movimientos no fueron lo suficientemente rápidos para intentar frenar a Cilic en el segundo enfrentamiento entre ambos.
El residente en Beverly, número uno del equipo británico de Copa Davis que se enfrenta la semana próxima al de España en Marbella, tendrá el tiempo justo para viajar y recuperarse para la cita contra el conjunto de Sergi Bruguera, que se disputará sobre tierra batida.
Allí llegará cerca del puesto 25 del mundo, su mejor ránking, después de completar el mejor Grand Slam de su carrera, derrotando a dos favoritos, el surafricano Kevin Anderson (11) y el búlgaro Grigor Dimitrov (3), y antes, al canadiense Denis Shapovalov y a Chung, en Brisbane, pero ahora tendrá que adaptarse a la tierra batida marbellí. EFE.