Marcelino García Toral, el gran artífice del despertar del equipo de la capital del Turia, ha dado con la tecla. Tras dos temporadas en las que el Valencia se encontraba anclado en una dinámica más que negativa, que le hizo temer incluso por perder la categoría, los chés han visto la luz al final del túnel y han conseguido, por fin, resurgir de sus cenizas. El conjunto de Mestalla ha finalizado la primera vuelta del torneo de la regularidad en la tercera posición, algo que no hacían desde la campaña 2011/2012, el último curso que finalizaron el campeonato en el ‘podio’. Aunque la tarea es muy complicada, los 40 puntos logrados le ha permitido seguir soñando con pelear el título con Barcelona y Atlético, primero y segundo, respectivamente, y mantener una distancia notable con el Real Madrid (8 puntos), cuarto clasificado.
El nuevo Valencia del técnico asturiano ha dado un giro de 360 grados y ha logrado superar los registros de las temporadas 09/10, 10/11 y 11/12 en las que acabaron las primeras vueltas en puestos de Champions y en las que terminaron ocupando en el tercer puesto por detrás de Barça y Real Madrid. En la primera de ellas finalizaron la primera parte del campeonato en la tercera posición con 39 puntos; en la segunda, cuartos con 37; y en la tercera, terceros con 35. La última vez que el equipo ché alcanzó estas cifras a estas alturas de la competición doméstica fue en la 14/15 (38 puntos), pero se encontraba en la quinta posición, en Europa League.
Un Valencia muy parecido al que conquistó la Liga en 2004
En lo que respecta a los registros goleadores, el conjunto blanquinegro ha anotado un total de 40 tantos, dos más que en la 2008/2009, el último curso en el que logró mejores resultados en el casillero de goles a favor. Los números de este Valencia se asemejan demasiado al que consiguió la última Liga en la 2003/2004. En el ecuador de aquel curso el cuadro de Mestalla, encabezado por Rafa Benítez, era líder en solitario con 43 puntos, había hecho 36 goles y tan solo había recibido 14. Todo se resume en que los pupilos de Marcelino han cosechado un punto menos, han anotado cuatro tantos más y han recibido cinco más (22 goles de diferencia en la 03/04 por los 21 de la presente campaña liguera). Una demostración del notable cambio que ha sufrido la categoría de oro del fútbol español, marcada por una gran exigencia que hace de ella la mejor Liga del balompié de todo el planeta.
Sin la preocupación de disputar competición europea, el Valencia se centra única y exclusivamente en no dejar de pelear el título liguero, finalizar en puestos Champions y hacer un gran papel en la Copa del Rey. El torneo del K.O. es un escaparate que resulta muy atractivo para la parroquia de Mestalla. La última vez que la afición valencianista vio a los suyos levantar un título oficial fue en 2008, año en el que el conjunto ché, liderado por el técnico holandés Ronald Koeman, se proclamó, precisamente, campeón de Copa al vencer por 3-1 al Getafe de Michael Laudrup en la final disputada en el estadio Vicente Calderón.
Los hombres de Marcelino han devuelto al Valencia al lugar que le corresponde por historia. La clasificación para la próxima edición de la Champions se da casi por hecho y no se descarta la consecución de algún título. Eso sí, lo que ya han logrado los ‘guerreros’ del técnico asturiano han han sido la ansiada estabilidad e ilusión, los ‘títulos’ que más echaba de menos los que cada quince días poblan las gradas de Mestalla.
