Hoy se cumplen 101 años de celebrarse el Día del Maestro. Fue el 28 de septiembre de 1917 cuando los diputados federales Benito Ramírez García y Enrique Viesca Lobatón presentaron la iniciativa correspondiente, aludiendo la injusticia prevaleciente con los profesores y la importancia de que la sociedad honrara su labor.
En su artículo 2° proponían: “los padres o tutores encargados de los niños, los enviarán en ese día a la casa de sus maestros, para saludarles, rindiendo el homenaje de su gratitud”. Al pasar al pleno para su votación, se observó la dificultad de asegurar que esa disposición se cumpliera; por lo que, en vez de ello, se aprobó: “En todas las escuelas se organizarán festividades culturales que pongan de relieve la importancia y nobleza del papel social del maestro”. Para cumplir con lo anterior, su artículo 1° estableció: “Se declara Día del Maestro el 15 de mayo, debiendo suspenderse en esa fecha las labores escolares”.
Más de un siglo ha pasado desde entonces y el reconocimiento hacia los maestros por parte de los padres de familia y de sus pupilos cada día se deteriora más, ya sea porque algunos profesores se lo hayan ganado a pulso, o por el olvido o ingratitud de la sociedad y de sus propios alumnos. Todavía a fines de la década de los sesentas, este día los maestros regresaban a sus casas colmados de regalos que los padres de familia -en la medida de sus posibilidades- enviaban como agradecimiento por la labor con sus hijos. Casi todos los alumnos llegaban al menos con una tarjeta impresa o dibujada por ellos mismos, o con una flor para su maestro o maestra.
Hoy, si bien en muchas escuelas se suspenden actividades contadas serían en las que se realice algún evento para recordar la función social del magisterio, como lo mandata el decreto publicado en el DOF el 3 de diciembre de 1917. Ahora, raro es el estudiante que en este día se digne en regalar al menos un saludo, ya no se diga un agradecimiento y felicitación a sus maestros.
Otros países celebran a los maestros en fechas distintas. México eligió este día para enlazar la función del maestro con la gesta heroica del 15 de mayo de 1867, cuando las tropas republicanas de Benito Juárez vencieron en Querétaro al Imperio de Maximiliano y la intervención extranjera. Se consideró que nadie mejor que los maestros para transmitir e inculcar a sus educandos los valores de la independencia, la libertad, la soberanía, la legalidad y el republicanismo.
Si los profesores tienen la obligación de predicar con el ejemplo al transmitir estos valores, al Estado le corresponde dignificar la labor del magisterio.
¡Felicidades a todos los maestros en su día!
