La relación entre los gatos y sus dueños es objeto de interés en el campo de la investigación científica. Un estudio reciente realizado por una universidad europea, dictaminó que los felinos tienen una preferencia por dueñas mujeres y describió los complejos vínculos emocionales que se generan entre ambos.
Esta investigación desafía las percepciones comunes sobre la independencia de los gatos y revela sorpresivos patrones de apego similares a los observados en relaciones humanas.
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Existe una curiosa preferencia de los gatos hacia las mujeres como sus dueñas principales, según expresó una investigación científica llevada a cabo por la Universidad de Viena en Austria.
Las mujeres suelen ser vistas como proveedoras de un entorno más tranquilo y afectivo para los gatos. (Fuente: Freepik)
De acuerdo al portal El Español, dos factores fundamentales influyen en esta preferencia:
Vocalización: las mujeres tienden a tener voces más suaves y dulces, lo cual resulta más atractivo para los gatos. Este tipo de vocalización genera una mayor afinidad en los felinos, llevándolos a preferir la compañía femenina.
Factor del tiempo y la interacción: las mujeres suelen interactuar más activamente con sus gatos que los hombres. Esto se traduce en un tiempo compartido más significativo, donde los gatos responden positivamente al vínculo establecido.
Este estudio desmiente la idea popularizada de que los gatos son animales independientes y distantes. Al contrario, demuestra que valoran establecer conexiones emocionales y sociales con las personas que los cuidan y les brindan un entorno seguro y afectuoso.
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Un equipo científico del Centro de Estudios sobre Interacciones entre Humanos y Animales de la Universidad Estatal de Oregón ejecutó una investigación empleando un "examen de base confiable" para establecer las clases de vínculos que los gatos desarrollan con sus cuidadores.
La universidad europea destacó que los gatos muestran una inclinación natural hacia la interacción femenina. (Fuente: Freepik)
Este procedimiento implicaba situar a los gatos y sus dueños en un entorno no familiar durante 120 segundos, aislarlos por otros 120 segundos, y posteriormente reunirlos por un lapso similar. Los resultados fueron los siguientes:
Al retornar los propietarios, cerca del 65% de los felinos manifestaban indicios de menor ansiedad, lo cual sugiere un tipo de conexión denominada "apego seguro".
El 35.7% restante exteriorizaba conductas de apego inseguro, como agitar la cola ansiosamente o relamerse.
Una indagación científica más contemporánea efectuada por la Universidad de Lincoln, en Pensilvania, reveló cinco modalidades de lazos que los gatos pueden forjar con sus tutores:
Vínculo alejado: el dueño exhibe una implicación emocional reducida, mientras el felino puede parecer indiferente y evadir la cercanía.
Vínculo remoto: aunque el tutor no percibe al gato como un compañero íntimo o miembro familiar, el comportamiento del animal hacia él es cordial.
Nexo informal: los felinos con esta clase de lazo optan por una existencia más autónoma y podrían desplegar afecto esporádico tanto hacia su dueño como hacia otros individuos.
Amistad: tanto el propietario como el gato exteriorizan cariño y aprecio recíproco de manera constante.
Interdependencia: en esta modalidad de relación, el gato y el tutor sostienen un lazo estrecho, particularmente en hogares donde el animal carece de acceso al exterior.
Estos descubrimientos evidencian la diversidad de modos en que los felinos pueden interactuar con sus cuidadores, abarcando desde nexos más independientes hasta vínculos profundos de afecto y dependencia emocional.
