No se sabe con certeza el número exacto de soldados ucranianos afectados por gases químicos desde el inicio de la guerra a gran escala . Ucrania calcula que alrededor de 2.000 tuvieron que recibir atención médica tras ser alcanzados por estas armas prohibidas. Al menos dos defensores murieron envenados. Abundan, sin embargo, los testimonios de militares que denuncian haber sufrido en sus carnes los efectos de estos agentes químicos lanzadas por Rusia. Los síntomas más comunes son vómitos, irritación en los ojos y sensación de asfixia. Los gases lacrimógenos CS y CN -empleado de forma común por las fuerzas policiales para el control de multitudes, pero prohibidos en el campo de batalla- comenzaron a utilizarse en Ucrania en desde drones...
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