Este fin de semana va a continuar la riada de solidaridad que se ha producido desde que hace más de cuarenta días la DANA provocara devastación y muerte. Esta reacción de muchas personas que durante semanas han dedicado y dedican su tiempo y su dinero a ayudar a los que sufren es un motivo de orgullo. La compasión, padecer con los otros, nos hace más humanos.