Las guardias indígenas de los pueblos kakataibo, shipibo y asháninka de la comunidad nativa Nuevo Azul denunciaron que están siendo acosados y amenazados de muerte por colonos dedicados a la tala y el cultivo ilegal de hoja de coca, en las regiones de Ucayali y Huánuco. La alerta se dio a conocer luego de que finalizara su congreso anual en la comunidad Mariscal Cáceres, en la región Ucayali.
“Hace tres días amenazaron a Pobleto Ribera, jefe de la comunidad nativa de UNI Katay, uno de los dirigentes de nuestras bases. Le enviaron un mensaje con fotografías de una persona decapitada, diciendo que ‘así te va a tocar a ti también en cualquier rato’”, contó a La República Segundo Pino, líder de la guardia indígena kakataibo.
Asimismo, denunciaron el incremento de cultivos informales y tala ilegal en el territorio kakataibo, en especial en las comunidades de Mariscal Cáceres, Yamino y Puerto Azul, lo que se realiza destruyendo bosques, “sin consulta ni consentimiento previo”.
Ante ello, pidieron a la Policía, al Ministerio Público y al Ministerio de Justicia intervenir en ejercicio de sus funciones y perseguir el crimen organizado y proteger a los defensores indígenas de derechos humanos.
“El pueblo indígena amazónico está siendo afectado por el narcotráfico, por las pistas clandestinas de avionetas y eso está comprobado. Se informó a las autoridades, pero no tenemos resultado”, señala el líder de la guardia indígena kakataibo.
Del mismo modo, solicitó el reconocimiento y soporte al trabajo de las guardias indígenas, en particular a los representantes de los gobiernos regionales y locales de Huánuco, Loreto y Ucayali. “Pedimos que se nos garantice el trabajo que realizamos dentro del territorio de los pueblos indígenas amazónicos”.
Este último pedido se debe al incremento acelerado de las actividades ilícitas como la tala ilegal, la minería ilegal, el narcotráfico y el tráfico ilegal de tierras y especies”.
En esa línea, el representante de la guardia indígena kakataibo señala que ellos están viendo la defensa de la integridad de sus autoridades y la de su territorio.
De otro lado, rechazaron las expresiones del magistrado del TC Gustavo Gutiérrez, quien cuestionó la existencia de pueblos indígenas no contactados.
